Estas empresas quieren irse de Rusia, pero tienen prohibido hacerlo

Con el conflicto armado entre Rusia y Ucrania, el mundo dio un giro inesperado. Países como Estados Unidos y la Unión Europea han aplicado diversas sanciones económicas al régimen de Putin. Estas crearon el escenario perfecto para una crisis económica en territorio ruso, haciendo que muchas empresas decidan irse del país. Sin embargo, algunas compañías del occidente quieren irse, pero no pueden hacerlo por cuestiones legales de sus contratos de franquicias.

Entre las empresas afectadas se encuentran la tienda minorista de ropa Marks & Spencer (M&S), la cadena de hoteles AccorHotels, la cadena hotelera Marriott International y la empresa de comida rápida Burger King. En total, las firmas tienen 1000 puntos de venta, de los cuales Marks & Spencer cuenta con 48, AccorHotels posee 28, Marriot International con 57 y Burger King con 800.

Estas firmas se manejan por contratos de franquicia, es decir, hicieron un contrato para que terceros lleven a cabo la explotación comercial bajo su nombre y con sus productos (a cambio de un canon) y no son las propietarias de esas sucursales propiamente dicho, lo que les dificulta sacar su marca de las calles principales y los centros comerciales rusos, ya que, en la mayoría de los casos, para revocar un contrato de franquicia deben darse ciertos supuestos que muy probablemente no se dieron.

El método de la franquicia es uno de los más utilizados en el mundo, sobre todo por empresas multinacionales debido a que la inversión la realiza una persona o sociedad ajena y el dueño de la marca cobra un dinero por cederla.

En una franquicia, el franquiciador es quien tiene el poder de la empresa real y el franquiciado es la persona o empresa que paga una tarifa por llevar a cabo un negocio con el nombre del franquiciador para vender sus productos.

Estas suelen tener clausulas como, por ejemplo, que los productos se deben comprar a un determinado proveedor o, por ejemplo, en el caso de alimentos, que se deben preparar de una forma en particular.

Si una de las partes no cumple el contrato, puede haber graves sanciones económicas, motivo muy probable por el cual estos franquiciadores no pueden sacar sus marcas de forma rápida del territorio ruso.