Empresas

El peor momento para emprender en Argentina

El gen emprendedor sigue vivo, pero de no cambiar en el corto plazo la realidad económica y política, es posible que esa llama se apague.

Jonatan Loidi - CEO de GrupoSet martes, 21 de septiembre de 2021 · 10:56 hs
El peor momento para emprender en Argentina
Foto: Foto gentileza entrepeneur.com

Argentina supo tener los mejores ratios de creación de empresas por cada 1.000 habitantes de la región, pero las sucesivas crisis y políticas de estado restrictivas lograron que el país hoy ocupe los últimos lugares en Latinoamérica. Nótese que no nombre países desarrollados; son países que tienen las mismas dificultades estructurales que nosotros, pero comprendieron que la mejor forma de combatir la pobreza es con trabajo, y el trabajo lo generan las empresas.

¿Por qué pasa esto? Para responder utilizaré un ejemplo que viene de la naturaleza: Para que la vida se genere en cualquier parte del planeta es necesario que existan ciertas condiciones, o lo que se conoce como un "ecosistema positivo". Por supuesto que la vida logra desarrollarse también en los ambientes más hostiles, pero esa vida no suele lograr crecer y destacarse por sobre la vida en ambientes mas favorables.

Hoy Argentina no cuenta con un ecosistema favorable para la creación y desarrollo de negocios. Les propongo un juego: nombraré cuales son las condiciones ideales para fomentar emprendimientos y ustedes dirán si se dan o no en nuestro país.

  • Mercados en crecimiento con poca pobreza y buen poder adquisitivo.
  • Apertura internacional para poder exportar los productos.
  • Créditos y mercado de capitales fuerte para que los emprendimientos se financien.
  • Leyes laborales que protegen al empleado pero que a la vez facilitan la incorporación de personal a bajo costo y sin industria del juicio.
  • Baja burocracia y costos de parte del estado para crear empresas.
  • Bajo nivel de impuestos regresivos que graban la producción.
  • Estabilidad económica para poder proyectar a largo plazo.
  • Estabilidad cambiaria.
  • Baja inflación.
  • Buena formación del mercado laboral, necesaria para poder crecer.

¿Cómo les fue? Podría agregar varias más, pero con esto es suficiente por ahora. ¿A cuantas pudiste poner SI y cuantas NO? Si las segundas superan a las primeras, ahí la principal razón de por qué Argentina se convirtió con los años en una asesina de empresas.

Para reforzar estos argumentos recurriremos a un estudio de ASEA (Asociación de Emprendedores de Argentina) realizado en pandemia, que no hace más que reflejar el impacto en el ecosistema empresario de las malas decisiones políticas, sumado el efecto pandémico, que por supuesto afecta aún más cuando ya la economía viene golpeada. Lo más alarmante no son los resultados, sino la falta total de propuestas o soluciones a futuro.

El presente estudio se realizo en los meses de marzo y abril de 2021, y asumimos por diferentes indicadores que esta situación puede ser aún peor a la fecha. En los próximos meses se conocerá el nuevo estudio de la asociación.

Supervivencia y tasa de cierre

Más de un cuarto de los emprendimientos afectados por la pandemia (27%) se vio forzado a cerrar de manera definitiva. La gran mayoría (64%) dejó de operar durante los primeros meses, en marzo y abril de 2020. Sin embargo, algunos emprendimientos manifestaron una tasa de supervivencia mayor y lograron seguir trabajando a pesar de las medidas de aislamiento: un 20% de los afectados reportó que cerró entre el período de septiembre y diciembre de 2020.

Quiénes fueron más golpeados

Los emprendimientos relacionados a salud y bienestar, gastronomía, arte y entretenimiento parecen ser los más afectados por la pandemia y son los que manifestaron la tasa de cierre más elevada.

Entre los motivos principales encontramos las disposiciones gubernamentales (34%), como el aislamiento preventivo obligatorio y la falta de demanda y/o clientes (34%). Los desafíos financieros (11%) y relacionados con el pago del alquiler del local (9%) ocupan el segundo lugar.

Por otro lado, no se ve una relación entre el tamaño de los emprendimientos -medido por la cantidad de empleados- y la tasa de cierre. Es decir, la cantidad de emprendimientos que sobrevivió a la pandemia en relación a aquellos que tuvieron que cerrar es similar tanto en emprendimientos unipersonales como en aquellos con 50 empleados. Más aún, ninguna de las personas encuestadas (que tuvieron que cerrar de manera definitiva) mencionó que los desafíos relacionados con los trabajadores fueran la causa del cese de operaciones.

En términos de antigüedad o robustez de los emprendimientos, la muestra parece sugerir que los emprendimientos más jóvenes, con menos de dos años, fueron más golpeados que aquellos con más trayectoria en el mercado. Sin embargo, es importante tener en cuenta que en la Argentina, 8 de cada 10 empresas llegan a los dos años de vida y, aún más, solo 3 de 10 llegan a los ocho años, según datos del Ministerio de Producción y Trabajo. Atravesar el llamado “valle de la muerte” siempre es un desafío, independientemente del contexto.

Impacto en las ventas y el empleo

Como era de esperar, cerca de la mitad de los emprendimientos afectados por la pandemia (40%) sufrió entre un 70% y un 100% de baja en las ventas. Esta baja parece haber afectado a todos los rubros por igual.

De acuerdo a la muestra más reciente, aquellos emprendimientos más grandes -es decir, que contaban con más personas trabajando antes de la pandemia-, parecen haber tenido que reducir el equipo de manera mucho más drástica que aquellos más pequeños.

Apoyo del Estado

La mayoría de los emprendimientos afectados (82%) reportó que no recibió ningún tipo de ayuda del Estado. El grueso de esos emprendimientos (65%) sabía de la existencia de medidas de apoyo pero no aplicó.

Expectativa a futuro

A los problemas que los emprendimientos y las Pymes ya acarreaban, como la falta de liquidez, la pandemia sumó la caída de ventas y la dificultad para pagar los salarios, entre otras cuestiones. En un contexto volátil, incierto, complejo y ambiguo (lo que se conoce como VICA), las personas que emprenden enfrentan a diario múltiples desafíos para mantener sus negocios a flote.

En este sentido, es importante entender cuáles son los desafíos principales de los emprendimientos que sobrevivieron o lograron reconvertirse y siguen trabajando, más o menos golpeados.

Según la muestra, la principal preocupación a corto plazo reside en la falta de demanda o clientes (56%). En un segundo lugar aparece el flujo de caja (39%) y los problemas políticos que generan un escenario de mayor inestabilidad y falta de soluciones concretas.

Como observamos los grandes desafíos de la Argentina siguen siendo los mismos. Los diferentes gobiernos no logran alinear objetivos de corto, mediano y largo plazo que permitan a los emprendedores desarrollarse, enfocarse en la internacionalización y el crecimiento. Lamentablemente en nuestro país el empresario pasa mas tiempo intentando sobrevivir que pensando en cómo crecer.

El déficit de empresas (creación versus cierre) es cada vez mayor. Datos del Ministerio de Producción muestran que hoy hay menos empresas que en 2007, lo cual explicaría el aumento de la desocupación y la pobreza.

Se necesitan políticas claras, simples y de largo plazo con acuerdo de todas las fuerzas políticas. Marcar el rumbo, definir una estrategia clara.

El gen emprendedor sigue vivo, pero de no cambiar en el corto plazo la realidad económica y política, es posible que esa llama se apague.

Vale aclarar que ASEA (realizadora del estudio) es una organización sin fines de lucro que tiene como principal objetivo promover políticas que ayuden a mejorar el ecosistema emprendedor en el país.

Entre sus logros se encuentran:

  • Más de 40 socios
  • Impulso y apoyo la Ley BIC (beneficio de interés colectivo)
  • Redacción de la Ley de emprendedores (LEY 27349)
(Aclaraciones metodológicas: La muestra incluye 292 respuestas de personas que emprenden en la Argentina en la Provincia de Buenos Aires (35%), CABA (28%), Córdoba (9%), Santa Fe (8%), Mendoza (3,4%), Neuquén (2,4%), Misiones (2%), Entre Ríos (2%), Salta (2%), San Juan (2%), Río Negro (1%), San Luis (1%), Chaco (1%), La Rioja (1%), Santa Cruz (1%), Tucumán (1%).)
Archivado en