Enzo Pérez-Demichelis y otros conflictos recordados entre jugadores y DT en River
Enzo Pérez y Demichelis volverán a verse hoy en la Supercopa Argentina. El recuerdo de cortocircuitos como los de Di Stéfano y el Beto Alonso, Mostaza Merlo y Gallardo, o Simeone y el Burrito Ortega.
Se fue del equipo en el que se convirtió en ídolo, en medio de tensiones internas. Con una mala relación con su entrenador, quien había sido su compañero en el Mundial de Brasil 2014, pero con la hinchada riverplatense ovacionándolo y gritando a viva voz: “¡Olé, olé, olé, olé, Enzo, Enzo!”. Líder indiscutido del equipo millonario en los últimos siete años y campeón de la Copa Libertadores 2018, Enzo Pérez cerró su ciclo en River Plate en diciembre pasado, meses después de la famosa “filtración” que Martín Demichelis protagonizó con periodistas en una supuesta conferencia “off the record” y que, se cree, fue el detonante del conflicto.
El volante de 38 años continuó su carrera en Estudiantes de la Plata, club donde brilló en su juventud y en donde también fue campeón continental. Esta noche, por esas vueltas de la vida, se enfrentará con el equipo cuyos hinchas aún lo adoran y con el entrenador que evidentemente no. Estudiantes y River se disputarán la Supercopa Argentina desde las 21.10 en el estadio Mario Alberto Kémpes, en Córdoba. Será tanto una final como el reencuentro entre Enzo Pérez y Martín Demichelis. ¿Se saludarán? ¿De anotarlo, gritaría un gol? El morbo que el partido despierta nos remite a antiguos recuerdos de otros famosos conflictos entre jugadores y entrenadores de River; algunos, entre dos glorias. La relación de Ramón Díaz con Enzo Francescoli, la bandera de “golpista” que cercanos a Mostaza Merlo le hicieron llegar a Gallardo y el ultimátum del Beto Alonso como consecuencia de su mala relación con Alfredo Di Stéfano son solo algunos de los casos.
Di Stéfano y Alonso
El rostro de Norberto Alonso aparece junto a Marcelo Gallardo, Ángel Labruna y otros pocos cuando se iza una bandera con los máximos ídolos de la historia de River Plate. Y Alfredo Di Stéfano, que jugó en el rojiblanco en la década del 40, pese a que su huella en el club es menor, es una gloria del fútbol mundial, ídolo del Real Madrid y dos veces Balón de Oro. Tal vez tales egos hayan sido los que ocasionaron en diciembre de 1981 el siguiente estallido: Di Stéfano, por entonces entrenador, no citó a Alonso para el equipo que disputaría la final del Nacional con Ferro. Si bien aún no había ganado la Copa Libertadores y la Intercontinental que conseguiría en 1986, el Beto era un prócer y había sido fundamental en los cinco títulos que River había conseguido desde 1975, tras una sequía de 18 años.
Furioso, el 10 encaró al presidente de la institución, Rafael Aragón Cabrera, y le dijo: “Mientras esté Di Stéfano en River, yo no juego”. La relación jamás mejoró, al punto de que doce meses más tarde Alonso redobló y amenazó con retirarse si no le concretaban una venta. En enero de 1982 se convirtió en jugador de Vélez, aunque a los dos años regresaría al club de Núñez y extendería su figura con, por ejemplo, la Copa Intercontinental obtenida frente al Steaua Bucarest, en 1986. En su propio libro, el Beto Alonso recordó una anécdota: “Estábamos en la confitería del club con Cabrera y unas 25 personas pasaron, rompieron su carnet de socios delante nuestro y se lo tiraban en la cara”.
Ramón Díaz y Francescoli
Fue menos tumultuosa, sin duda, y no los privó de ganar la Copa Libertadores de 1996, pero Ramón Díaz y Enzo Francescoli tenían una relación, como mínimo, fría. Desde su llegada como entrenador, la relación de Ramón y los jugadores no fue la mejor, pero pesaban más los resultados positivos. En una entrevista realizada hace 16 años, Enzo reveló un poco de cómo había sido aquella conveniencia: “Mi idea era convivir con él (Ramón) de la mejor manera. Por eso le dije al grupo: `Tratemos de no enquilombarnos, la cosa va a estar bien, no tenemos ningún problema radical con Ramón, convivamos con las “pelotudeces” y vamos arriba´”.
¿Las “pelotudeces”? Francescoli remarcó, por ejemplo, lo ocurrido en 1996 tras ganar la Libertadores: “Nos jodía que subiera al escenario en una cena después de ganar la Libertadores (1996) y agradeciera a todos, menos a los jugadores. Rompe las pelotas, viste, porque el que juega es el jugador. Estábamos en la mesa y nos mirábamos re calientes. Yo no tengo problemas con Ramón ni los quiero tener, pero las cosas como son”.
Mostaza y Gallardo
Reinaldo Merlo fue jugador de River durante 14 años y obtuvo 7 títulos. Como entrenador, tuvo dos períodos. El segundo estuvo marcado por su conflicto con quien hoy es el ídolo máximo del club: Marcelo Gallardo. Todo empezó en aquel fatídico entretiempo de 2005. River jugó contra Gimnasia y Esgrima de la Plata y el Muñeco fue expulsado en el primer tiempo. En el vestuario, antes de iniciar la segunda mitad, Mostaza le dijo: “Es de poco hombre dejar al equipo con 10”. A lo que Gallardo le contestó con insultos y protagonizaron una difusión que hizo que el entretiempo durara más de los 15 minutos pactados. Merlo le pediría disculpas luego, pero algo ya se había roto.
Al año siguiente, la gota que rebalsó el vaso. Gallardo enfrentó a su DT a raíz de un entrenamiento que no lo había satisfecho y le dijo: “No es nada personal, pero estoy incómodo jugando acá, no estoy de acuerdo con tu proyecto, con la forma de entrenar y de jugar. Así no te voy a servir, se va a generar quilombo”. Crudo, sincero. Y le dio a entender que no era el único con dichos pensamientos… La frase suena cordial, pero alguna vez allegados a Mostaza hablaran de “piñas y tiradas de pelo”. Difícil corroborarlo; lo cierto es que Merlo le avisó a los dirigentes a las 4 de la mañana del día siguiente que renunciaba a su cargo, y el Muñeco más tarde recibió una bandera que decía: “Ortiva y golpista”.
Simeone y el Burrito Ortega
Tal vez la más famosa de las peleas. River había salido campeón del Clausura 2008 siendo entrenado por Diego Simeone. Ariel Ortega, que por entonces tenía 34 años, fue importante en el título y ya había anunciado que se iría de River. Con el trofeo ya en su poder, puesto que el Millonario lo había conseguido con una fecha de anticipación, el Burrito esperaba tener una merecida despedida dada su condición de ídolo. Pero el Cholo le dijo que no concentrara, porque no iba a jugar.
En una entrevista con Atilio Costa Febre en 2020, el futbolista nacido en Jujuy habló de traición y reveló la intimidad del pleito: “Yo fui a la habitación de él ese domingo y le dije todo lo que tenía que decirle a él y a Nelson Vivas. Los re puteé a los dos, ellos me dijeron sus cosas y quedó ahí. Después yo salí a declarar, pero primero se las dije a él. Me dolió porque fue como una traición. Ya habíamos salido campeones, yo podría haber jugado dos minutos, entrar, salir, me iba de River y se terminó. Pero hay gente que se cree más importante que el club y que el fútbol”.
Muchos de ellos fueron campeones con River; algunos, ídolos. Sin duda, todos grandes protagonistas de la historia del Millonario. Pero solo dos se reencontrarán esta noche, atosigados por los conflictos del pasado: Enzo Pérez y Martín Demichelis. ¿Indiferencia o falsa cordialidad? ¿Qué se verá?