El accidente que dejó con las manos vacías a Agustín Canapino en las 500 Millas de Indianápolis

Agustín Canapino no pudo lograr el objetivo que se planteó en la previa de las 500 Millas de Indianápolis. El piloto argentino tenía en mente poder completar la competencia, pero a pocas vueltas del final intentó esquivar un accidente producido delante suyo, perdió el control de su auto cuando tocó la parte interna y se golpeó fuerte contra uno de los muros del mítico escenario. 

En ese momento rompió la dirección de su monoplaza, siguió en pista sin poder controlarlo y golpeó el auto detenido de Patricio O'Ward quien había protagonizado un incidente cuando luchaba por la victoria. Afortunadamente solamente hubo que lamentar roturas mecánicas y el cuatro veces campeón de Turismo Carretera bajó por sus propios medios del auto. 

Ricardo Juncos, director del equipo, habló al respecto y llevó tranquilidad luego de lo ocurrido: "Una lástima lo de Agustín. Una locura con la agresividad que relanzaron, pero así sin las 500. Había hecho un trabajo fantástico, y lo importante es que está bien, que no le pasó nada". El argentino fue trasladado para realizarle chequeos de rutina pero no sufrió lesiones de consideración.

Canapino, el primer argentino en 83 años que compitió en una de las pruebas que componen la "Triple Corona" de la actividad junto con al Gran Premio de Fórmula 1 en Mónaco y las 24 Horas de Le Mans, tuvo un gran rendimiento que alcanzó el tercer puesto, hasta la vuelta 190, cuando la carrera se detuvo con posterior reanudación por un accidente.

Josef Newgarden (Team Penske), campeón de la Indy Lights en 2011, se proclamó ganador por primera vez en su carrera, al superar en el duelo mano a mano de los metros finales al sueco Marcus Ericsson, quien venía de triunfar en la edición anterior.