Karate kata: conocé el deporte más raro de los Juegos Olímpicos

El karate es un deporte milenario japones que cuenta con más de 500 años de antigüedad. A la hora de pensar en esta práctica, seguramente proyectemos la pelea entre dos karatekas y eso es correcto si de la disciplina kumite se trata. Pero la versión de este deporte que asombró al mundo en estos Juegos Olímpicos es el karate kata, una disciplina en donde el deportista pelea contra un rival imaginario.

El karate kata es una versión de este arte marcial en la cual el deportista desempeña una performance de movimientos defensivos y ofensivos, pero sin ningún oponente en frente. Funciona como muestra de movimientos, los cuales cada competidor debe elegir de los 102 disponibles según la Federación Mundial de Karate.

La selección del ganador está a cargo de los siete jueces que presencian los kata, brindando su opinión según el nivel técnico y el nivel atlético del karateca que es evaluado desde el saludo inicial hasta el saludo final. Las posiciones, los movimientos de transición, la correcta respiración y la concentración son algunos de los factores fundamentales que los deportistas deben cuidar si quieren ganar.

Los motivos más llamativos por los que se puede descalificar a un karateca en karate kata son: anuncio del movimiento (kata) equivocado, no saludar al comienzo o al final de la ejecución del kata, atentar contra la integridad física de un juez o la caída del cinturón que compone el uniforme.

Para conocer al ganador del karate kata se toman las siete calificaciones de los jueces. Las mejores dos y las peores dos se descartan, dejando así las tres notas del medio, que al sumarlas da el resultado final de la ejecución. La española Sandra Sánchez derrotó 28.06 - 27.88 a la japonesa Kiyou Shimizu por la medalla dorada en los Juegos Olímpicos Tokio 2020.

Lamentablemente, las disciplinas de karate aún no están confirmadas para la cita olímpica de París 2024, aunque cada vez más los protagonistas de este deporte en Tokio 2020 se hacen escuchar con el fin de volver a ser protagonistas de esta disciplina en la capital francesa.