Presenta:

Maltrato en clínicas y hospitales: qué dice la ley y cómo defenderte sin ser abogado

¿Te dejaron desnudo, te tocaron sin explicar, te trataron como si no importaras? No es normal, y podés reclamar. Así lo dice la ley.

Cómo defenderte en caso de recibir maltratos en clínicas u hospitales.

Cómo defenderte en caso de recibir maltratos en clínicas u hospitales.

ALF PONCE MERCADO / MDZ

¿Te dejaron desnudo, te tocaron sin explicar, te trataron como si no importaras? No es normal, y podés reclamar. Así lo dice la ley.

Dugar, de 84 años, lo dejaron horas con el pañal sucio en una camilla, sin ayuda para higienizarse, sin privacidad, sin biombo. Nadie avisó a su familia. Nadie se hizo cargo.

Agostina, en pleno trabajo de parto, la rodearon varios estudiantes y residentes que nadie le presentó ni le pidió permiso para estar. Nunca consintió ser observada. Nadie explicó nada.

Ema, postoperado y débil, lo dieron de alta sin explicarle su diagnóstico, sin entregarle el informe médico y sin saber siquiera qué tratamiento había recibido.

Ricardo, de 76 años, lo dejaron esperando en el pasillo durante horas, con frío y sin frazada. Tenía fiebre. Nadie le explicó por qué no lo pasaban.

Paula, madre de un niño internado, nunca le dieron una copia de la historia clínica. Le dijeron que “no hacía falta” y que “ella no iba a entender”.

Mirta, con sobrepeso, la hicieron subir sola a una camilla alta y le dijeron en voz alta: “Si no puede, que baje de peso”. Otros pacientes escucharon todo.

Carlos, con VIH, lo atendieron con doble guante y sin contacto físico, “por precaución”, aunque su patología no lo requería. Salió humillado.

Son sólo ejemplos de lo que pasa todos los días en clínicas y hospitales de la Argentina, tanto públicos como privados.

Y no, no es una falla del sistema. Es un patrón. Es maltrato. Y es una violación directa a los derechos del paciente reconocidos por ley.

Qué dice la ley sobre el trato digno al paciente

La Ley 26.529 garantiza que toda persona tiene derecho a recibir atención médica con trato digno y respetuoso, sin discriminación, sin exposición innecesaria y con pleno respeto a su intimidad, consentimiento informado y autonomía de voluntad.

Esto no es un gesto de buena voluntad: es una obligación legal. Y significa, entre otras cosas, que nadie puede:

  • Desvestirte sin explicarte ni cubrirte adecuadamente
  • Aplicar un tratamiento sin tu consentimiento previo
  • Darte el alta médica sin informarte qué tenés y qué riesgos existen
  • Negar información a tu familia si estás inconsciente o impedido
  • Gritarte, menospreciarte o ignorarte por tu edad, condición económica o social

Y sí, aunque parezca increíble: todo esto pasa todos los días en clínicas y hospitales del país. Pero no debería. Y la ley te da herramientas para que no siga pasando.

¿Por qué no es un simple error? Porque es una falta grave

La misma Ley 26.529, en su artículo 21, califica como falta grave cualquier incumplimiento de los derechos del paciente. Esto habilita sanciones a los profesionales como suspensión, inhabilitación e incluso cancelación de matrícula y a las instituciones médicas también, tanto civiles como penales. No es un mero “problema interno” ni “mala atención”: es responsabilidad legal.

Además, existen precedentes judiciales en todo el país que reconocen indemnizaciones por daño moral cuando se prueba trato indigno, falta de respeto a la intimidad o aplicación de tratamientos sin consentimiento.

Lo que nadie te dice: aún en una camilla, tus derechos siguen intactos

Estar enfermo no te convierte en objeto. Estar internado no te anula. Ser paciente no significa renunciar a la dignidad. La medicina no puede olvidar que detrás de cada historia clínica hay una persona.

El trato digno no es un “plus”, es un derecho. Y si no te lo garantizan, lo podés exigir. No importa si estás en una clínica de lujo o en una guardia pública: el respeto es obligatorio.

Cómo hacer un reclamo si fuiste maltratado

Muchas personas no se animan a reclamar por miedo a represalias, por desconocimiento o porque creen que “así son los hospitales”. Pero no: la ley está de tu lado, y podés reclamar aunque no seas abogado.

¿Cómo hacerlo?

  • Presentá una nota firmada dirigida a la dirección del establecimiento
  • Guardá copia sellada, comprobante o foto del libro de quejas
  • Si lo hacés por correo electrónico, usá una cuenta personal con copia a una oficial
  • Si necesitás formalizar el reclamo, podés enviar una carta documento
  • Conservá siempre registros, fotos o testigos

Más abajo vas a encontrar un modelo completo de reclamo para que lo uses tal cual o lo adaptes.

Modelo de reclamo por trato indigno en centros de salud

Al Director del Establecimiento Asistencial:

Yo, [Nombre y apellido], DNI [Número], con domicilio en [Calle, número, localidad y provincia], constituyendo domicilio electrónico en [Correo electrónico], me presento ante usted en mi carácter de paciente y/o acompañante de esta institución, a fin de reclamar el respeto a la intimidad y a la voluntad en el tratamiento médico que se me está aplicando.

Los hechos que motivan esta presentación son los siguientes:

[Describir claramente los hechos ocurridos, indicando lugar, fechas, personas involucradas y situaciones que considere ofensivas, negligentes o contrarias a la ley.]

Por lo expuesto, solicito que se garantice el respeto inmediato de mis derechos como paciente, conforme a lo establecido en la Ley 26.529, artículos 2, 5, 6 y 14.

Ante la negativa, demora o silencio de las autoridades, y sin perjuicio de la responsabilidad civil o penal que pudiere corresponder, advierto que el incumplimiento de dicha normativa configura una falta grave, según lo establece el artículo 21 de la Ley 26.529, siendo pasibles de las sanciones previstas en el Título VIII de la Ley 17.132 (Régimen Legal del Ejercicio de la Medicina), así como de aquellas que disponga la legislación vigente en esta jurisdicción.

Firma: [Nombre y apellido]

Fecha: [Día, mes y año]