En Mendoza, más de 5.000 estudiantes se encuentran en riesgo alto de abandono escolar

La Dirección General de Escuelas (DGE) dio a conocer los datos del Sistema de Alerta Temprana (SAT), integrado actualmente como un componente esencial de los Sistemas de Protección de Trayectorias vinculado al sistema de información provincial (GEM). Desde el año 2021 la provincia de Mendoza ha avanzado en la construcción de un SAT propio, diseñado para abordar la problemática de la exclusión escolar, buscando mejorar el acompañamiento y la intervención en cada trayectoria educativa en Riesgo de Interrupción Escolar (ITE). De acuerdo a esta medición, en junio del 2024, un total de 5.817 estudiantes del nivel secundario se encontraban con un alto riesgo de interrupción o abandono escolar. 

A partir del análisis de un conjunto de datos cargados en el GEM, que incluyen factores individuales, familiares, escolares y comunitarios, el SAT calcula la probabilidad de interrupción de cada estudiante. Ese valor se estima utilizando un modelo construido con Inteligencia Artificial (IA) que identifica una serie de patrones comunes entre aquellos estudiantes que interrumpieron sus trayectorias escolares y, en función de estos, define el modelo que se utiliza para calcular la probabilidad de exclusión escolar de cada estudiante.

Romina Durán, directora de Evaluación de la Calidad Educativa de la DGE explicó a MDZ que “el Sistema de Alerta Temprana se entrena con información de estudiantes que efectivamente abandonaron años anteriores en algún momento y, en función de las características que tienen estos estudiantes anticipa o predice riesgo en la trayectoria de los chicos que están hoy por hoy en el sistema escolar”. Es a partir de los datos que se cargan en el GEM que la Inteligencia Artificial elabora las estadísticas. Además de las calificaciones, están los datos de contexto como el nivel de escolarización de los padres, la ocupación de la familia, entre otros. “Todos esos son factores que influyen digamos que están relacionados con la trayectoria de cada uno de los chicos”, señaló Durán. 

La probabilidad de interrupción escolar que calcula el SAT se agrupa en tres categorías y se visualiza en de la siguiente forma: baja (verde), media (amarillo) y alta (rojo). A partir de los datos obtenidos del GEM y del modelo de predicción, durante el mes de junio de 2024 se pudo calcular el porcentaje de riesgo de ITE para 140.329 de los 145.293 estudiantes del nivel secundario de la provincia, logrando un 96% de cobertura de la matrícula total, debido a la falta de información suficiente en GEM para determinar el riesgo de interrupción o abandono escolar del 4% restante.

Los números de alarma

La predicción del SAT en el mes de junio, dio que el 4,1% de la población de estudiantes del nivel secundario se encuentran en nivel de riesgo de ITE alto, lo que corresponde a 5.817 estudiantes. El 22,8% se encuentra en nivel de riesgo medio, es decir, 32.060 estudiantes; mientras que 73% está en riesgo bajo, 102.452 estudiantes. “Lo que nos hace este sistema es poner una alerta, nos muestra quiénes son los estudiantes que tienen en riesgo su trayectoria. Como toma en cuenta varios factores, por ahí son factores contextuales los que ponen en riesgo la trayectoria del chico. Pero lo que se hace es generar un mecanismo de acompañamiento a las trayectorias al interior de cada una de las escuelas”, sostuvo la Directora de Evaluación de la Calidad Educativa.

Del total de 5.817 estudiantes en riesgo alto de abandono escolar, el sistema detectó que 5.402 se encuentran en escuelas de gestión estatal (92,9%) y 415 en escuelas de gestión privada (7,1%). Al analizar los resultados por nivel educativo: secundario orientado y secundario técnico se pudo determinar que del total de estudiantes con riesgo alto, 4.333 pertenecen a secundarias orientadas (75%) y 1.484 a secundarias técnicas (25%). En ambos niveles, se evidencia que el 4% de las/os estudiantes de secundario orientado presentan un riesgo alto de Interrupción de Trayectoria Escolar (ITE).

Para el análisis, además, se tuvieron en cuenta tres ámbitos: urbano, rural o marginalizado. “Las escuelas tienen un ámbito determinado y ese ámbito tiene que ver con las condiciones de contexto”, indicó Durán. Sin embargo, estos ámbitos no pueden distinguirse por zonas, aclaró la funcionaria. “En casi todos los departamentos hay escuelas marginales, las escuelas de ámbitos rurales es más fácil localizarlas pero dentro de la ruralidad también hay escuelas marginales, entonces es difícil discriminarlo por zona. Son las escuelas las que tienen esa categoría”, remarcó.

La medición determinó que la cantidad de estudiantes con riesgo alto en el ámbito urbano es de 3.206, es decir el 4%. En el ámbito rural, los estudiantes con riesgo alto también representan el 4%, con un total de 1.121 estudiantes. Mientras tanto, son 1.484 los estudiantes que presentan un riesgo alto en contextos de marginalidad. Esto representa el 6% de quienes asisten a establecimientos secundarios en este ámbito. Además, el porcentaje de estudiantes con riesgo medio también es mayor en estos contextos (29%), en comparación con el ámbito urbano (21%) y el ámbito rural (22%). 

La DGE le muestra a cada institución no solamente el porcentaje de su matrícula en riesgo alto, medio y bajo de abandono escolar sino también los cursos, divisiones, los nombres de aquellos estudiantes que están en riesgo y las causas por las cuales se encuentra en riesgo esa trayectoria. “Es la institución junto con el Servicio de Orientación, preceptores, docentes y la familia del estudiante los que determinan cuáles son esos factores que están poniendo en riesgo la trayectoria y, en función de eso, se generan diferentes estrategias y acciones que lo que buscan es acompañar y sostener la trayectoria de los estudiantes. Osea, el éxito de la herramienta tiene que ver con el uso, con lo que se puede generar al interior de la institución educativa”, indicó Duran. 

A fin de año se espera una nueva medición del SAT. “Gracias a esa información, nosotros podemos pensar o planificar diferentes acciones, medidas oficiales, decisiones políticas para poder acompañar mejor a los chicos”, concluyó la funcionaria.