Protectores solares: los desopilantes precios para cuidarse la piel

El verano está a la vuelta de la esquina, y por lo tanto, el calor, mediante las altas temperaturas, ya se empieza a sentir en el ambiente.

Por esa razón, la gente ya comienza a pensar en ventiladores, aires acondicionados y piletas para mitigar el impacto del clima sofocante que se avecina.

El sol no es un tema menor, y su intensidad obliga a la gente a cuidar su piel cada vez que sale al aire libre. Para ello, será fundamental la utilización de protector solar, para evitar quemaduras, que pueden ser severas si no se toman precauciones.

Sin embargo, uno de los grandes problemas de las cremas protectoras consiste en los precios. La inflación golpea a todos los sectores de la economía argentina, y este rubro no es la excepción.

Sin ir más lejos, los productos con factor de protección solar (FPS) 50, no bajan de los $10.000. A partir de ese valor, podemos varias marcas y modelos, llegando al más costoso, que vale 23.077 pesos.

Vale destacar que todos estos productos, al menos en una de las cadenas de farmacias consultadas, tienen un descuento de hasta el 40% por el Cyber Monday. El más caro (sin rebaja) es un fotoprotector en spray pediátrico, que cuesta $28.847.

Valores más económicos, productos menos efectivos

Si bien es cierto que actualmente se atraviesa por una crisis económica, también es una realidad que es necesario protegerse contra el sol.

Ante ese escenario, es mucha la gente que busca economizar, y aunque existen cremas solares con precios más bajos, las mismas no son iguales de efectivas que aquellas que tienen factor de protección solar (FPS) 50.

Hablamos estrictamente de los protectores solares que cuentan con 30 y 40 FPS, que se pueden encontrar en farmacias y supermercados a valores que rondan entre los $8.000 y los $9.500, aunque incluso se pueden hallar cremas de 5.600, confeccionados por marcas no tan conocidas.

Efectivamente, los valores son menores y significan un ahorro para el cliente, pero su eficiencia claramente mermará; y por lo tanto, los consumidores se encuentran en la difícil disyuntiva de adquirir productos de menor calidad pero mejor precio, o protectores solares más costosos y efectivos.

El calor trae consigo una serie de motivos por los cuales cuidarse es sinónimo de gasto. El protector solar es uno de ellos, y los clientes no podrán eludirlo, aunque así lo desearan.