Crimen de la arquitecta: el asesino fue condenado a perpetua por matar a María Pía Persia, pero no se trató de un femicidio
Francisco Benjamín Pinavaría Corbalán (23) fue condenado a prisión perpetua por el crimen de la arquitecta María Pía Persia tras la lectura de la sentencia por parte del juez David Mangiafico, quien se basó en el veredicto del jurado popular popular, el cual lo encontrase culpable -de manera unánime- del delito de "homicidio doloso agravado por criminis causa en relación a robo simple".
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La postura del jurado desestimó que el asesino haya matado a la arquitecta por el simple hecho de ser mujer, es decir, no consideró el agravante de violencia de género y descartó que fuese un femicidio, pero votó de manera unánime que el asesinato fue para tapar un robo.
"El jurado encuentra al imputado culpable por el delito de homicidio doloso agravado por ser críminis causa en relación a un robo simple", se escuchó en la lectura del veredicto minutos pasados de las 16.30 en una de las principales salas del Polo Judicial Penal.
Tras un breve cuarto intermedio pedido por el juez David Mangiafico, el magistrado tomó la palabra, se basó en el veredicto del jurado popular y dictó "prisión perpetua" para Benjamín Pinavaría.
El caso: así mataron a María Pía Persia
El femicidio fue descubierto el sábado 15 de julio de 2022 cuando la artista de 49 años fue hallada muerta en su vivienda de la calle Joaquín V. González 283, de la capital mendocina, adonde había decidido mudarse y también alquilar a turistas. El cuerpo de la mujer fue hallado por uno de los albañiles que trabajaba en la remodelación de su casa, quien alertó a la Policía.
Al arribar al lugar, los policías constataron que la víctima yacía tendida en el piso, boca abajo; en tanto que el Cuerpo Médico Forense determinó luego que se trató de una muerte violenta por estrangulamiento.
Por su parte, Benjamín Pinavaría tenía antecedente por encubrimiento lo que permitió que sus huellas genéticas ya estuvieran cargadas en Laboratorio del Ministerio Público Fiscal. De esta manera, se logró el resultado positivo al comparar su ADN con el de la prenda que se utilizó como lazo para estrangular a la víctima.
También los registros de cámaras de seguridad revelaron que el albañil imputado entró y salió de la vivienda de Persia en horarios cercanos al crimen, que, a su vez, coinciden con la geolocalización que marcaron las antenas telefónicas sobre su celular y el de la víctima.