El inesperado origen de la canción del Mundial de Clubes que nadie puede dejar de tararear
Lo curioso es que esta canción, que parece simple y alegre, guarda dentro una crítica aguda. Tal vez ahí esté su fuerza.

El Mundial de Clubes despertó emociones.
Una canción repetitiva, pegajosa y contagiosa volvió a sonar en todos los rincones. Desde las transmisiones del Mundial de Clubes hasta los reels en redes, “Freed From Desire” reapareció 30 años después. Aunque muchos la asocian con tribunas o goles, su origen está lejos de la pelota. Gala Rizzatto no pensó en estadios cuando la escribió.
La canción que no puedes dejar de cantar por estos días
Corría el año 1996 y Gala, nacida en Milán pero radicada en Nueva York, observaba con atención lo que pasaba a su alrededor. La desigualdad social, el brillo exagerado del dinero, el culto a las celebridades. Todo eso la incomodaba. Por eso, la canción que hoy se canta con sonrisas fue pensada como una crítica. Su letra, que parece simple, esconde una idea fuerte.
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La primera explosión llegó en Europa. Las radios bailaban su ritmo y las pistas la recibieron con los brazos abiertos. Luego el tiempo la guardó en una caja de recuerdos noventeros, hasta que un delantero llamado Will Grigg la rescató casi sin querer. Fue en 2016, cuando los hinchas de Irlanda del Norte decidieron modificar su letra.
Así nació “Will Grigg is on fire”. Una simple ocurrencia de tribuna que viralizó la melodía en cuestión de días. Desde ese momento, el tema volvió a circular. En YouTube, en estadios, en compilaciones futboleras. Pasó de ser un himno personal a un grito colectivo, aunque Gala no tenía intenciones de convertirla en símbolo deportivo.
Mira la letra en español
El fútbol, sin embargo, no suelta lo que funciona. Por eso la FIFA la eligió para musicalizar el Mundial de Clubes en Estados Unidos. Y con ese gesto, la devolvió a lo más alto de las listas. Gala lo aceptó sin reparos, aunque nunca dejó de repetir que la canción tiene historia propia, más allá del fútbol y de la fama.
En su cuenta de Instagram, lo primero que se lee es “Freed From Desire”. Para ella, ese tema es más que un estribillo pegajoso. Es un reflejo de lo que piensa, de lo que ve, de lo que siente. Aunque ahora suene mientras alguien espera un penal o celebra un pase filtrado, Gala sabe que su mensaje inicial sigue intacto.