Bizcocho de manzana en sartén: receta fácil y sin horno

El bizcocho de manzana en sartén es una opción deliciosa y práctica para disfrutar de un postre casero sin necesidad de horno. Este bizcocho destaca por su textura esponjosa y suave, con un toque de manzanas caramelizadas que aportan un sabor dulce y ligeramente ácido, ideal para los amantes de los postres frutales. Al cocinarse en una sartén, se convierte en una receta accesible, perfecta para aquellos momentos en los que deseas un dulce rápido y sencillo.

La combinación de manzanas y canela le da un aroma cálido y hogareño, ideal para acompañar un café o té en cualquier momento del día. Además, esta receta utiliza ingredientes básicos que suelen estar en la despensa, como harina, huevos, azúcar y aceite, y permite personalizarse con diferentes tipos de manzanas, según prefieras un sabor más dulce o ácido. La técnica de caramelizar las manzanas directamente en la sartén ayuda a intensificar su sabor y crear una base jugosa y dorada para el bizcocho.

Este bizcocho en sartén es versátil y fácil de hacer, ideal tanto para cocineros principiantes como experimentados que buscan un postre reconfortante sin complicaciones. ¡Vamos a la receta!

Ingredientes 

Para el bizcocho: 1 taza de harina de trigo todo uso (aproximadamente 130 g), 1 cucharadita de polvo de hornear (5 g) para que el bizcocho tenga una textura esponjosa, 1/4 cucharadita de bicarbonato de sodio para ayudar en el levado (opcional), 1/4 cucharadita de sal para realzar los sabores, 1 huevo grande (60 g) a temperatura ambiente, que aporta estructura y humedad, 1/3 taza de azúcar (aproximadamente 70 g), que le da dulzura y ayuda a caramelizar, 1/4 taza de yogur natural (60 ml), preferiblemente sin azúcar, que aporta humedad y suavidad, 1/4 taza de leche (60 ml), también a temperatura ambiente, para darle esponjosidad a la masa, 1/4 taza de aceite vegetal (60 ml), que aporta humedad y evita que el bizcocho se endurezca, 1 cucharadita de extracto de vainilla para aromatizar el bizcocho, 1 cucharadita de canela en polvo para dar un sabor cálido que combina bien con la manzana.

Para las manzanas caramelizadas: 1 o 2 manzanas grandes (aproximadamente 200 g cada una); puedes usar manzanas rojas para un sabor más dulce o verdes para un toque más ácido, 1/4 taza de azúcar moreno (50 g), que aporta un sabor profundo y carameliza las manzanas, 1 cucharada de mantequilla (15 g), para ayudar a caramelizar y añadir cremosidad.

 

Procedimiento

1. Lava, pela y corta las manzanas en rodajas finas o en cubos pequeños. Esto permite que se cocinen y se caramelicen de manera uniforme.
2. En una sartén antiadherente grande (idealmente de 24 cm de diámetro), derrite la mantequilla a fuego medio.
3. Agrega el azúcar moreno y revuelve hasta que se derrita y comience a burbujear.
4. Añade las manzanas y cocina de 5 a 7 minutos o hasta que se ablanden y estén ligeramente caramelizadas. Retira del fuego y distribuye las manzanas de manera uniforme en el fondo de la sartén.
5. En un bol grande, mezcla la harina, el polvo de hornear, el bicarbonato de sodio, la canela y la sal. Tamiza los ingredientes secos para evitar grumos y lograr una textura suave.
6. En otro bol, bate el huevo con el azúcar hasta que la mezcla esté ligera y espumosa.
7. Añade el yogur, la leche, el aceite y el extracto de vainilla. Bate bien hasta obtener una mezcla homogénea.
8. Incorpora los ingredientes secos a los líquidos poco a poco, mezclando con una espátula o batidor de mano en movimientos envolventes. Esto ayudará a que el bizcocho no pierda aire y quede esponjoso. No mezcles en exceso.
9. Vierte la mezcla del bizcocho sobre las manzanas caramelizadas en la sartén. Con la espátula, alisa la superficie de la masa para que quede uniforme. Tapa la sartén y cocina a fuego muy bajo durante unos 25-30 minutos. Es importante mantener el fuego bajo para evitar que el bizcocho se queme en la base antes de que se cocine por completo.
10. Pasado el tiempo, inserta un palillo en el centro del bizcocho. Si sale limpio, está listo; si no, cocina unos minutos más. Apaga el fuego y deja reposar el bizcocho tapado durante 5 minutos para que termine de asentarse.

 

Pasa un cuchillo o espátula por el borde del bizcocho para despegarlo de la sartén. Coloca un plato grande sobre la sartén y, con cuidado, dale la vuelta para que el bizcocho caiga sobre el plato con las manzanas caramelizadas hacia arriba.Deja enfriar unos minutos antes de cortar. Este bizcocho se saborea tanto caliente como a temperatura ambiente.

Este bizcocho es delicioso y tiene una textura suave que combina perfectamente con el dulzor de las manzanas caramelizadas. Perfecto para acompañar con una taza de té o café. ¡Y a disfrutar! Recuerda, si tienes dudas o quieres aportar sugerencias de recetas, nos puedes contactar a cocinemosjuntosmdz@gmail.com te contestaremos a la brevedad.