Qué es el acné felino y cómo es el truco definitivo para eliminarlo de tu mascota

Todo amante de las mascotas, como los gatos, sabe que es crucial darles todos los cuidados necesarios para garantizar su bienestar general. Sin embargo, algunos problemas de salud específicos pueden afectar a los peluditos, a pesar de todo nuestro esfuerzo. Este puede ser el caso del acné felino, una afección cutánea que puede generar malestar en estas adorables mascotas.

El acné felino es una condición común que afecta principalmente a la barbilla y alrededor de los labios de los gatos. De acuerdo con el sitio de mascotas Experto Animal, este acné se caracteriza por la presencia de pequeños puntos negros, comedones o incluso enrojecimiento en la piel, causando molestias e incomodidades en los felinos. Esta afección puede ser provocada por diversos factores, como el estrés, alergias, el uso de platos sucios para la comida, problemas hormonales o una mala higiene.

Afortunadamente, existen métodos sencillos y caseros para prevenir y tratar el acné felino. En principio, se debe prevenir y, para ello, mantener la higiene es fundamental. Es por eso que los expertos aconsejan limpiar el área afectada con regularidad utilizando un paño limpio y agua tibia para eliminar la suciedad y los restos de comida. Además, se recomienda cambiar con frecuencia los platos de comida y evitar el uso de plásticos en ellos también puede prevenir la aparición del acné.

Pero, si es demasiado tarde y el acné felino apareció en la barbilla del gatito, existe un remedio capaz de eliminarlo. La veterinaria creadora del canal de YouTube "Como gato panza arriba" reveló que el primer paso es limpiar la barbilla del felino con ayuda de un antibacteriano como la clorhexidina. Se puede aplicar suavemente sobre las áreas afectadas con un algodón o un hisopo, dos veces al día durante unos días hasta que los síntomas disminuyan.

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Si el acné no desaparece, la veterinaria señala que, dependiendo del caso, se puede tratar con antibióticos o antifúngicos. Y, en casos más graves, el veterinario de confianza podría recetar corticoides para que los gatitos no se laman la zona afectada. Por supuesto, no está de más decir que todo el tratamiento lo debe indicar un profesional, por lo que hay que estar atentos a la aparición de cualquier síntoma.