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Nardo: todos los cuidados que debes darle a esta preciosa flor estival

Los nardos destacan por tener una bella flor blanca que es capaz de perfumar todo el jardín. Conoce sus cuidados.
NARDOS Foto: SHUTTERSTOCK
NARDOS Foto: SHUTTERSTOCK

El jardín es ese espacio verde al que destinamos las más lindas plantas para llenar de vida el hogar. Muchas personas ven la jardinería como una forma de recreación o de hobby en el que se pasan horas y horas tratando de darle el mejor cuidado a cada especie plantada. Sin embargo, no es necesario ser experto para ser un fanático de la belleza y del perfume de las plantas. Simplemente debes informarte acerca de los cuidados que requieren y brindarles un ratito de tu tiempo libre. De esta forma, tu jardín se verá precioso y lleno de color.

Si hablamos de las flores más lindas que se pueden disfrutar en temporada de calor, el nardo es, sin dudas, una de ellas. Científicamente conocida como Agave amica, esta planta perenne destaca por sus preciosas flores blancas que florecen en verano, además de otorgar un dulce aroma a cada rincón del jardín. Es nativa originalmente del centro y sur de México, pero se ha extendido por todo el mundo bajo nombres como narciso, tuberosa, azucena o vara de San José. 

Si esta especie te encanta para sumar a tu jardín, te traemos cada uno de los cuidados que no debes perder de vista para que su crecimiento sea el mejor. 

Cuidados que requiere el nardo

  • Cultivo y ubicación

Según el sitio de jardinería, Ecología Verde, “el nardo necesita cultivarse a pleno sol, incluso en una ubicación con incidencia directa”. Además, esta planta prefiere las temperaturas cálidas, por lo que expertos recomiendan plantarlo a principios de primavera, una vez que las heladas hayan acabado. 

  • Riego 

Los jardineros aseguran que es esencial regar el nardo cada 48 horas aproximadamente, mucho más si están recién plantados. No obstante, ten cuidado de evitar encharcar el sustrato o la tierra. Cuando aparezcan los primeros brotes, puedes regar la planta cada 72 horas.

  • Suelo y abono

El nardo requiere de un suelo bien drenado para poder crecer sin encharcamientos. En cuanto al abono, se recomienda usar compost, humus de lombriz o fibra de coco. El abonado debe realizarse durante los meses cálidos, cada 15 días aproximadamente. 

  • Poda

Después de la primera floración es tiempo de podar el nardo. Esto es recomendable para estimular el brote de nuevas flores en la planta. Si hablamos de la poda de mantenimiento, sitios de jardinería recomiendan retirar siempre las hojas que se marchiten o las partes que se encuentren en mal estado para evitar contagiar al resto.