La peor predicción sobre el coronavirus según el creador de la vacuna de Pfizer
El inmunólogo alemán Ugur Sahin, que trabajó en el desarrollo de la vacuna de Pfizer-BioNTech, habló sobre la potencial fecha límite del virus mortal en una conferencia de prensa virtual esta semana donde se le preguntó cuándo la vida podría volver a la normalidad.
Pese a la aparición de las vacunas, el coronavirus sigue expandiéndose y ahora a través de una nueva cepa que podría ser aún más letal por lo que Ugur Sahin, cofundador y director ejecutivo de la farmacéutica BioNTech, ha afirmado que el covid-19 se quedará con nosotros al menos durante la próxima década.
En ese sentido, Sahin también sugirió que el fármaco podría ser ajustado para la nueva cepa, detectada recientemente en el territorio británico, en aproximadamente seis semanas. "Necesitamos una nueva definición de normalidad. El virus permanecerá con nosotros durante los próximos 10 años", aseveró Sahin.
El inmunólogo alemán que trabajó en el desarrollo de la vacuna de Pfizer-BioNTech, habló sobre la potencial fecha límite del virus mortal en una conferencia de prensa virtual esta semana donde se le preguntó cuándo la vida podría volver a la normalidad.
La vacuna contra el SARS-CoV-2 de BioNTech, desarrollada con el gigante farmacéutico estadounidense Pfizer, ha sido autorizada para su uso en más de 45 países, incluidos Reino Unido y Estados Unidos.
"En principio, la belleza de nuestra tecnología es que podemos comenzar directamente a diseñar una vacuna que imite por completo esta nueva mutación. Podríamos ser capaces de proporcionar una nueva vacuna técnicamente dentro de seis semanas", aseveró el ejecutivo.
A mediados de noviembre, Sahin afirmó en una entrevista que gracias al uso de la vacuna, desarrollada por BioNTech y Pfizer, la vida debería volver a la normalidad el próximo invierno boreal.
El director ejecutivo de la farmacéutica expresó la esperanza de que el fármaco pueda reducir a la mitad la transmisión del virus, lo que resultaría en una "reducción drástica de los casos". Los desarrolladores esperan que los pacientes que reciban la vacuna —que consta de dos dosis inyectadas en el brazo con tres semanas de diferencia— sean inmunes al coronavirus durante al menos un año.