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La promesa del cuerpo perfecto

La Lic. en Nutrición Noelia Giorlando reflexiona sobre la felicidad y las expectativas sobre nuestro cuerpo.

sábado, 13 de abril de 2019 · 02:29 hs

Siempre, desde siempre y para siempre, la felicidad ha sido el fin último de cada ser humano; cada intento, cada cambio, cada movimiento es dado con la intención eterna de estar bien, de ser felices. Pero la búsqueda no es sencilla y es necesariamente personal, primero hay que entender que la felicidad es un viaje, donde la paz se construye, recién con ese primer descubrimiento podemos ir componiendo nuestra propia felicidad, que no es la que nos venden los medios; esa única, inalcanzable, corporal y condicionada felicidad, del cuerpo perfecto.

Cuando nuestro bien estar está sujeto a una condición externa, como el deseo de un cuerpo ideal (¿ideal para quién? ¿Ideal según quién?) la promesa de felicidad nunca se concreta, sólo aumenta la ansiedad, la frustración y la tristeza, ponerle una condición a la felicidad, es como ponerle un precio, que generalmente es mucho más alto, del que nuestro cuerpo y mente pueden pagar.

El segundo paso, es la propia decisión de ser felices, esta elección es la llave que abre las puertas de la aceptación, del agradecimiento, del optimismo, que nos preparan no para caminar este viaje, sino para bucear mar adentro, hacia un re encuentro con nosotros mismos; con nuestras ideas, creencias, valores, experiencias, derrotas, logros, con nuestra historia y con nuestro cuerpo.

Colocar la imagen corporal, como un modelo de felicidad tangible, es correr un viaje imposible de controlar, ajeno a nuestro manejo, es peligroso, ficticio, un relato fantástico que tomamos como una verdad salvadora, en la que creemos y a la que nos sometemos.

Enseñemos a transitar la felicidad, que el cuerpo sólo sea un medio saludable para ir aprendiendo a ser cada día un poquito más felices. La felicidad es una búsqueda por suerte interminable, una decisión diaria, y el cuerpo y la manera de cómo vivimos nuestro cuerpo, es la confirmación de nuestros logros internos. Te espera un viaje que dura toda la vida, disfruta y cuida tu cuerpo, lo vas a necesitar.