El pueblito de San Luis que está entre los mejores del mundo y es perfecto para el fin de semana largo

Este pintoresco pueblo de San Luis, se destaca por su singular belleza colonial y su turismo rural. Es por ello, que es uno de los representante de Argentina en los "Best Tourism Villages", concurso de la Organización Mundial del Turismo de las Naciones Unidas en el cual se escoge a las mejores villas turísticas de todo el mundo.

Esta pequeña localidad, ubicada en el corazón de las Sierras Centrales de San Luis, es una de las que participa. Se llama La Carolina, se encuentra a 83 kilómetros al noreste de la ciudad puntana, a 1600 metros de altitud sobre el nivel del mar, y allí se respira aire fresco y puro. 

Su casco principal se encuentra rodeado de hermosos arroyos, y sus calles recientemente empedradas se lucen acompañadas de las casas también revestidas en piedra originaria, lo que le da al pueblo su estilo colonial. En este tesoro entre sierras se resguarda al historia de los primeros buscadores de oro de Argentina.

Si bien en sus inicios se lo conoció como San Antonio de las Invernadas, en 1794, el virrey Sobremonte, gobernador intendente de Córdoba del Tucumán, cambió el nombre del pueblo por su actual “La Carolina”, en honor del rey Carlos III de España. Un refugio de los primeros momentos de la fiebre del oro en el país, el destino conserva su historias y los sueños de los mineros en cada uno de sus rincones. 

Los imperdibles de La Carolina

Este pueblo es ideal para visitar en una escapada de fin de semana largo. Entre los imperdibles para descubrirlo se encuentran las expediciones al interior de las minas, visitar la Iglesia de Piedra, cabalgatas, subir al cerro Tomolasta, recorrer por la gruta de Inti Huasi, visitar a Casa Piedra Pintada con sus pinturas rupestres y la histórica Casa de Juan Crisóstomo Lafinur, Museo de la Poesía Manuscrita.

Uno de los atractivos más visitados es la gruta de Inti Huasi, un domo andesítico de origen volcánico situado en la zona central de las sierras de San Luis a 20 kilómetros de La Carolina. Este sitio es considerado uno de los yacimientos arqueológicos prehistóricos más importantes de América y se conforma por dos socavones poco profundos que se encuentran protegidos naturalmente por una amplia arcada que conforma un vestíbulo natural.

El primer asentamiento humano de la gruta data de 6.200 a.C. Actualmente, se puede visitar todos los días del año, con entrada libre y gratuita. Quienes visiten el lugar podrán recorrer una pasarela con exposición de restos óseos y líticos.