Cuáles son las diferencias entre calabacín y calabaza

Mucha gente tiene dudas con respecto a la diferencia entre calabacín y calabaza. Sus nombres son tan parecidos que quizás necesites un poco de ayuda para diferenciarlos y conocer las propiedades de cada uno.

Ambas forman parte del grupo de las cucurbitáceas, aunque son especies diferentes, pertenecen al mismo género y por lo tanto tienen muchas características similares. Pero hay varios puntos que hacen que las podamos distinguir fácilmente sin confundirnos

Características distintivas del calabacín y la calabaza

Es común que las personas confundan estas plantas entre sí antes de que sus frutos comiencen a madurar. El calabacín suele ser espeso y la mayoría de las variedades no se enredan. Hay algunos tipos que se arrastran, pero la mayoría no. Las hojas de la planta de calabacín son de color verde oscuro, grandes y tienen de cinco a siete lóbulos que se irradian desde un punto. Las hojas y los tallos tienen pelos diminutos y espinosos. Cuando aparecen las flores, tienen cinco pétalos de color amarillento/anaranjado.

Por su parte, las calabazas crecen en enredaderas muy largas y las hojas pueden ser tan grandes como una pelota de fútbol. Estas hojas son de forma más redonda y generalmente tienen bordes dentados con tres o más venas; las bonitas flores son de un vibrante naranja o amarillo. Mientras que las hojas suelen ser de color verde oscuro, pero también pueden ser de color verde claro o grisáceo.

Fruta de calabaza versus fruta de calabacín

Una vez que estas plantas comienzan a producir frutos, realmente puedes notar la diferencia. Los calabacines suelen tener una piel verde intenso, pero también pueden ser de color amarillo medio a brillante. Además de eso, la forma general suele ser recta, pero las variedades amarillas pueden tener bases bulbosas y ser más afiladas hacia la parte superior. Tanto la calabaza verde como la amarilla tienen interiores blanquecinos y algo esponjosos.

Debes cosechar la mayoría de las calabazas en otoño y, aunque hay más variedades, no son tan versátiles para cocinar. Pueden ser redondas, oblongas o redondeadas y varían en color de blanco, pasando por amarillo, hasta llegar a naranja. Sus cáscaras son mucho más gruesas y rígidas que las de los calabacines y maduran a principios de otoño, lo que las hace perfectas para la temporada de Halloween.

¿De qué manera sueles consumir calabacín y calabaza? ¿Conocías sus diferencias?