Qué es de la vida de la princesa Ana de Inglaterra

La princesa Ana (71) de Inglaterra es hija de la reina Isabel II. Participa de modo activo de los compromisos que tiene la familia real y quienes la conocen de cerca dicen que no hay en ella vanidad alguna.

Gran jineta, compitió en las Olimpíadas de Montreal en 1976 por equitación, nunca ha cambiado de talle de ropa desde los 19 años y es por ello que no le gusta gastar en eso. Prefiere elegir prendas duraderas, clásicas y elegantes para que le duren muchos años y poder seguir usándolas.

Excepto por los vestidos para eventos, la princesa Ana no suele invertir más que en tiaras, tweeds y prendas que duran años. 

Su elegancia es un ícono de estilo en el Reino Unido y un sello distintivo entre los royalties del mundo, al punto de que la compara con la sofisticación de la reina Letizia de España. Al menos así lo expresó el director de la legendaria Vogue británica, Edward Enninful. 

La princesa Ana cumple entonces no solamente con los actos y compromisos sino también con el protocolo de vestimenta de la familia real. La tiara es su elemento indispensable para hacer muchas de las visitas internacionales y lucir espléndida, como cuando se presentó ante Richard Raloh, gobernador de las Islas Hébridas en 1996.
 

En los encuentros con otras autoridades, siempre le destacan su gusto y devoción por un tejido llamado Harris Tweed para hacer bufandas, abrigos y otras prendas que duran toda la vida. 

Además, la princesa Ana asiste a las galas variando su importante colección de vestidos pero siempre reutilizándolos, en algunas ocasiones con pequeños arreglos aquí y allá. Un detalle, un ruedo o un aplique que lo haga parecer diferente.
 

Un buen ejemplo es el modelo en tonos malva con bordados en plata que la princesa Ana desempolvó de otros eventos para unirse a los reyes de España no hace tanto tiempo.

Con sus guantes de color blanco más allá del codo, como dicta el protocolo, Ana demostró ser toda una princesa con un look adecuado, elegante y reciclado. Por supuesto, es ella quien preside organizaciones como la Asociación del Textil y de la moda del Reino Unido.

¿Les extraña? ¡Para nada!

Asiste a las semanas de la moda en Londres, es quien entrega premios al diseño, como lo hizo a la diseñadora de joyas Rosh Mahtani, creadora de la marca Alighieri y lo hizo, por supuesto, enfundada en un traje sastre reciclado color verde esmeralda que ya había lucido en el palacio de Buckingham en una recepción junto a su madre, la reina Isabel II, para los reyes de Jordania y su heredero, el príncipe Hussein.

¿Saben cómo llegó allí? ¡En subterráneo!

Sí, la austera princesa Ana tomó el subterráneo en la estación Green Park próxima a palacio hasta la estación St. Paul y con un trayecto de 15 minutos estuvo puntual a donde tenía que ir.

¿Conocías el papel de la princesa Ana, su estilo particular y su rol dentro de la familia real?