El motivo por el que María Pedraza dejó de bailar danza

A pesar de haber dejado de bailar danza de forma profesional, María Pedraza ha podido combinar sus dos pasiones en la tercera película de Jota Linares Las niñas de cristal. Entérate el motivo por el que su gran pasión pasó a ser un gusto que solo revive cada tanto para no olvidarlo.

María Pedraza: La danza y la interpretación

La joven actriz de 26 años tiene mal acostumbrados a sus seguidores mostrando espectaculares fotografías en su Instagram. Allí, presume no solo su esbelta y atlética figura, sino también el haber sido una gran bailarina de ballet. "Hace siete años era bailarina de danza clásica y dicen que todos tenemos en esta vida el destino escrito o quizás yo soy de las creen en eso".

Lo cierto es que María Pedraza nunca pensó que se tendría que dedicar solo a la actuación y mucho menos llevarlo como un estilo de vida. Sí sabía que quería dedicarse al arte escénico y disfrutar encima de unas tablas, pero no estando en el papel de otra persona. Y es que su sueño como artista había sido siempre bailar danza hasta morir. Ella misma reconoció en varias entrevistas que sus inicios en la actuación fueron absolutamente fortuitos, como sucedió con muchas otras actrices.

En la última película que protagonizó, Las niñas de cristal, María tuvo la suerte de unir por fin sus dos pasiones: la danza y la interpretación. Fue una llamada que recibió con mucha ilusión al saber que protagonizaría una película de ensueño: "Cuando recibí la llamada de Jota, no estaba pasando por uno de mis mejores momentos porque no sé contar historias sin sentir pasión y admiración por ellas".

María Pedraza dejó de bailar danza profesional

Era una total desconocida hasta que Esteban Crespo, un director de cine la descubrió a través de su Instagram. María Pedraza estudió danza clásica en el Real Conservatorio Profesional de Danza Mariemma.

Sin embargo, para su tristeza, tuvo que olvidarse de la posibilidad de dedicarse completamente al mundo del baile de forma profesional. Padeció una lesión muy compleja durante su adolescencia que la dejó con los pies absolutamente destrozados: "Lo peor es cuando se te caen las uñas".

En ese momento, fue su madre quien la advirtió de que aún estaba a tiempo de seguir en el mundo del espectáculo, pero de otra manera, a través de la interpretación. De esa forma y con la ayuda de Crespo, María Pedraza se fue introduciendo en el mundo de la actuación. Así, fue como terminó participando de series de gran éxito internacional como fue en La casa de papel y Élite, entre otras.

El baile siempre estuvo muy presente en su vida y hasta lo siente prácticamente como una extensión más de su propio ser: "Cuando bailo, me siento yo. Cuando bailo, me creo a mí y siento que todo es verdad".

Aunque asegura que su rumbo cambió totalmente y de forma inesperada, acabó enamorándose de lo que hoy es su profesión, la de actriz. Sin embargo, dejó en claro que no se olvidará nunca de todo lo que le ha dado la danza.

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