Glamourosa de noche, supermamá de día: dos versiones de Jennifer Lawrence

Jennifer Lawrence se convirtió en madre por primera vez hace aproximadamente un año y medio. La actriz, de 33 años, está en pareja con Cooke Maroney y ambos se muestran felices en esta nueva etapa de su vida. Después de tener a su bebé, la vida de Jennifer cambió por completo. "La mañana después de dar a luz, sentí que toda mi vida había comenzado de nuevo. Como, ahora es el primer día de mi vida. Solo lo miré. Estaba tan enamorada", declaró. 

El hijo de la actriz se llama Cy, en honor al pintor Cy Twombly, uno de los artistas favoritos de su marido. Y regularmente podemos ver a Jennifer en fotografías paseando con él y llevando diferentes juguetes, sillas plegables o mochilas. Así se mostró esta semana, recorriendo las calles de Nueva York con su bebé sentado en su carrito. La ganadora de un oscar por "El lado bueno de las cosas", recorría las calles vestida de lo más normal, con un jersey de color mostaza, camisa blanca larga y gafas de sol. 

Lo que sorprendió a todos sus seguidores fue que el mismo día la actriz logró transformarse. Paso de la comodidad a la elegancia total para estar en la fiesta anual WWD Honors, en la que se reconoce a diferentes personalidades del mundo de la moda y que se ha celebrado en el exclusivo restaurante Cipriani South Street de Nueva York.

Jennifer logró deslumbrar con un vestido negro de escote asimétrico firmado por Dior que combinó con unos tacones de charol nude. Además, acompaño este look con unos llamativos pendientes dorados tamaño XXL y unos intensos labios color rojo. 

Desde que fue madre, Jennifer ha demostrado que aunque su hijo sea lo más importante de su vida, no va a dejar su carrera de lado. La actriz re incorporó rápidamente a su rutina de trabajo luego de dar a luz. Es así que los últimos meses podemos verla en diferentes estrenos, galas de premios o desfiles.