Sergio Romero debe modificar su casa por una insólita queja de sus vecinos

Sergio Romero fue intimado a derribar un mini parque de aventuras que levantó en su patio para sus hijas ya que los vecinos de su casa en Inglaterra se quejaron. La instalación es una especie de fuerte, con una casita y toboganes, que al arquero argentino le costó unos 23.000 euros.

Según informa el diario The Sun, Romero instaló el área de juegos para sus hijas, junto a su esposa Eliana Guercio, a pesar de no haber obtenido el permiso para hacerlo.

La instalación ha provocado las quejas de los vecinos del ex arquero de la Selección argentina, quienes aseguran que Romero solicitó el permiso municipal después de levantar los juegos. The Sun cita a un vecino que asegura que "esta enorme instalación es más adecuada para un parque temático comercial que una calle residencial tranquila".

Al parecer, lo que molesta es que el fuerte se haya levantado en el jardín delantero de la casa, quedando a la vista de todo el barrio. Según otro vecino, el tamaño de los juegos pueden significar "una distracción para los automovilistas que pasan".

La casa de juegos se instaló hace un año en la mansión familiar, valuada en 3,2 millones de euros. Tras la inspección municipal, Romero recibió la orden de derribar la estructura ya que el área de juego afectaba a la visual de la calle y al vecindario.