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Cómo ejercitarse seguro en verano y evitar un golpe de calor

Evita las altas temperaturas, hidratarse bien y adaptar la actividad física a horarios frescos para prevenir el golpe de calor y cuidar la salud.

Realizar actividad física siempre es positivo, pero se recomienda hacer caminatas, ciclismo o deportes de competición antes de las 10 o después de las 18 hs.

Realizar actividad física siempre es positivo, pero se recomienda hacer caminatas, ciclismo o deportes de competición antes de las 10 o después de las 18 hs.

Santiago Tagua / MDZ

La llegada del verano y los días de altas temperaturas hacen necesario tomar precauciones adicionales para poder mantener la actividad física de manera regular. Es importante saber que el calor, el uso de indumentaria con materiales sintéticos y la ingesta de alimentos hipercalóricos contribuyen a aumentar la temperatura corporal.

Les recomiendo una serie de cuidados para no perjudicar la salud y contribuir al bienestar. Realizar actividad física siempre es positivo, pero se recomienda hacer caminatas, ciclismo o deportes de competición antes de las 10 o después de las 18 hs. Por otro lado, es imprescindible evitar el sol del mediodía y no olvidar usar protector solar adecuado.

La hidratación, debe realizarse antes, durante y después del ejercicio. Tomar 120 cc de agua cada 20 minutos son suficientes para actividades moderadas que duren menos de una hora. En actividades que se desarrollen por más tiempo, es recomendable el uso de bebidas isotónicas antes y después del ejercicio. Y siempre estar atentos a las señales que nos da nuestro organismo.

OIP (11)
La hidratación, debe realizarse antes, durante y después del ejercicio.

La hidratación, debe realizarse antes, durante y después del ejercicio.

Cómo evitar golpes de calor

Nuestro organismo genera distintas reacciones fisiológicas para defenderse del golpe de calor. Por ejemplo, al aumentar la temperatura corporal se produce una mayor irrigación sanguínea en la piel y el sudor actúa como un regulador, produciendo el enfriamiento corporal. “Sin embargo, si a las altas temperaturas se suma un aumento de la humedad ambiente, la evaporación por el sudor se hace más difícil.

Si bien toda la población puede verse afectada por el aumento de las temperaturas, los adultos mayores, los lactantes y los niños, las mujeres embarazadas, los trabajadores que desarrollan su actividad en el exterior y las personas de escasos recursos -cuya alimentación no es variada-, están más expuestos. Es fundamental usar ropa ligera y fresca; y mantener una correcta hidratación.

Los aumentos rápidos de la temperatura debidos a la exposición a condiciones más calurosas que el promedio “comprometen la capacidad del cuerpo humano de regular su temperatura y pueden ocasionar síntomas como calambres, agotamiento o golpes de calor, entre otros.

* Dra. Liliana Rolón (MN 124339), líder de la Dirección Médica de vittal