Cigarrillos electrónicos: el "chupete electrónico" que destruye pulmones
En el marco del Día Mundial sin Tabaco alertan sobre los graves riesgos de los cigarrillos electrónicos en jóvenes.
El 31 de mayo fue el Día Mundial Sin Tabaco, y la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) emitió un documento alertando sobre los daños a la salud que provoca el uso de cigarrillos electrónicos, especialmente en jóvenes. Marta Braschi, pediatra y toxicóloga de la SAP, explicó en MDZ Radio los peligros de estos dispositivos, cuya comercialización no está regulada.
Contenidos desconocidos y alta adicción
"Lo que se está vendiendo ahora son vapos, también llamados vaper, que tienen un líquido de contenido desconocido, porque Argentina no ha regularizado su uso", señaló Braschi. Estos dispositivos, importados ilegalmente, contienen altas dosis de nicotina: "Cada cartucho tiene entre 10.000 y 100.000 pitadas. Cada 10 pitadas equivalen a un cigarrillo. La cantidad de nicotina que consume un adolescente desde que se levanta hasta la tarde es enorme", advirtió.
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La especialista destacó que los jóvenes los usan "como un chupete electrónico", atraídos por sabores frutales y la percepción de que son inofensivos. Sin embargo, generan "taquicardia, hipertensión, mareos y una dependencia mucho más rápida que el cigarrillo tradicional".
Existen riesgos graves para la salud y Braschi alertó sobre dos patologías emergentes: arritmias cardíacas y neumonitis lipoidea, una fibrosis pulmonar causada por los aceites del vaporizador. "Un chico de 16 años termina en respirador, mientras un adulto con décadas de tabaquismo solo requiere oxígeno", comparó. Además, remarcó que estos dispositivos son promovidos como "moda cool" y símbolo de estatus, lo que dificulta su control.
Falta de regulación y campañas de concientización
La SAP reclama políticas públicas urgentes. "No hay campañas nacionales como con el tabaco. Los padres no saben qué consumen sus hijos, y los pediatras no están entrenados para preguntar sobre estos hábitos", afirmó. Braschi insistió en que la solución requiere educación y regulación: "Las campañas deben ser masivas, en colegios y medios, para que se entienda que no son inocuos".
Mientras los vaporizadores se venden libremente —incluso en kioscos— sin advertencias sanitarias, la SAP insiste en tratar su consumo como un problema de salud pública. "Es igual que las gomitas de cannabis: son productos diseñados para que el adolescente caiga en la adicción", concluyó.