Reinauguran la Casa sobre el Arroyo, una joya arquitectónica que volvió a su estado original

La Casa sobre el Arroyo, popularmente conocida como "Casa del Puente", una de las obras de arquitectura moderna más reconocidas a nivel mundial, volvió a su estado original tras una serie de obras que la reformaron por completo en un lapso de dos años con financiamiento del Gobierno nacional.

Las reformas -que serán inauguradas oficialmente este jueves- estuvieron atravesadas por la pandemia de coronavirus y tuvieron desafíos mayúsculos, por un lado recuperar el mobiliario original característico de la casa y poner en valor el hormigón de la fachada que incluso durante los trabajos recientes fue blanco de graffiteros. 

"Lo más difícil de hacer fue el techo, la quinta fachada, en la terraza jardín de la casa, que tiene dos pendientes. Encontramos muchos daños que ocasionaban filtraciones y se procedió a implementar un sistema de tacos sobre los que van apoyados los mosaicos y tuvimos que hacer el arreglo integral que nos garantizara la impermeabilización", explicó a MDZ la actual directora de la Casa sobre el Arroyo, Arq. Magalí Marazzo, quien supervisó rigurosamente las tareas en representación de la Municipalidad de General Pueyrredon.

En medio de un inmenso parque se erige la casa que es atravesada por uno de los arroyos fundacionales de Mar del Plata, Las Chacras -que la divide en dos-, en un terreno con un centenar de especies de árboles que dificultaron parte de los trabajos, porque no pudieron ingresar con camiones ni instalar contenedores en el edificio declarado Monumento Histórico Nacional. En su defecto, tuvieron que trasladar con mangueras las toneladas de elementos que fueron desechados. 

"Hubo un proyecto aparte del que tuvimos con la restauración que fue la recuperación del mobiliario, logramos recomponer el sector de la cocina en su estado inicial, y colocar la misma cocina y heladera, los sillones BKF, y el sillón Safari, objetos que ya forman parte del acervo de lo que será muy pronto un museo", reconoció la arquitecta. 

En el interior repusieron los adoquines clásicos de algarrobo colorado y se reciclaron muchos de ellos con cortes precisos que luego se volvieron a armar "numerados, como si fuese un rompecabezas".

También se instalaron los siete tipos de luminarias del interior y exterior de la casa mediante reconstrucción 3D de piezas imprescindibles para su reposición.

La obra fue diseñada por los arquitectos Amancio Williams y Delfina Gálvez Bunge entre los años 1943 y 1945, respondiendo al pedido de Alberto, padre de Amancio, quien era un eximio músico y tuvo en el interior de la casa dos pianos Blüthner, el último de ellos destruido por uno de los incendios intencionales que sufrió el inmueble. Gracias a gestiones a contrareloj, uno de estos pianos volverá a embellecer el cuarto creado especialmente para el instrumento y tendrá el lujo de estrenarlo el pianista Horacio Lavandera, que participará de la reinauguración prevista para el próximo jueves con un show que promete sorpresas y emoción.

Abandonada por años y siendo refugio de ladrones y vagabundos, una inversión de $56 millones permitió la restauración, consolidación y conservación de la totalidad del edificio principal, así como la casa de los caseros, que también se encontraba en ruinas. Estos arreglos forman parte de la primera de tres etapas que buscan convertir a la Casa sobre el Arroyo en un museo, que para llegar al su etapa final deberán cumplir requisitos de accesibilidad que hoy no tiene, disponibilidad de baños y la construcción de oficinas linderas que faciliten las visitas.

Participarán del acto reinaugural el Presidente Alberto Fernández, los ministros de Cultura, Tristán Bauer, y de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, junto al intendente Guillermo Montenegro, y parte de su gabinete, familiares de sus antiguos moradores y hasta de los fundadores de Mar del Plata, junto a otras personalidades reconocidas.

"Alberto Fernández y Montenegro ya confirmaron su presencia, y nos hablaron de muchísimas facultades, de colegios de arquitectos, de archivos históricos, todos quieren venir y nos enorgullece. Por eso vamos a instalar pantallas gigantes para que ese día sea una fiesta para todos. El jardín y la casa tienen un espacio realmente limitado", anticipó, sobre el acto que se realizará en el predio ubicado en Quintana esquina Funes, muy cerca del complejo universitario.

El jefe de Estado visitó los avances de la obra en enero pasado y destacó que el Estado seguirá invirtiendo en "salvar" edificios como el antiguo Instituto Saturnino Enrique Unzué y el Parador Ariston. También destacó que la famosa casa es una de las obras que obsesiona al ministro Bauer porque tiene que ver con su historia familiar, ya que sus abuelos trabajaron en su construcción.

Sobre el futuro inmediato de la Casa sobre el Arroyo, Marazzo alertó que "debe contar con seguridad las 24 horas que permita preservar los arreglos y toda la inversión realizada" y mencionó que por el registro de cámaras vieron a gente merodear por el predio y hasta pintar nuevamente algunos sectores, en pleno trabajo de restauración. 

"Hay que mantener una conservación preventiva del bien, que es algo estipulado en el mismo pliego, y que instalar un sistema de alarma perimetral que permita vigilarla en sus adyacencias. Ya la volvieron a pintar y fue algo que nos rompió el corazón y nos costó mucho trabajo volver a quitar. Ya tenemos cuidadores que estarán todo el día y tenemos el compromiso de la policía que va a realizar rondines por esta zona. Tenemos que comprometernos todos", advirtió la especialista. 

Los trabajos comprendieron las tareas de reacondicionamiento de la cubierta, las fachadas, mamposterías, revoques, cielorrasos, contrapisos y solados, zócalos, herrería y elementos metálicos, carpintería y tabiquería, herrajes, mobiliario y equipamiento para interiores, mesadas, pinturas, vidrios y espejos. También, se renovaron las instalaciones sanitarias, eléctricas, termomecánicas y electromecánicas, sumado a la restauración y puesta en valor integral desde la envolvente general hasta el detalle de los herrajes, barandas, luminarias, equipamiento de cocina y baños.

Se trata de una obra que forma parte de prestigiosos catálogos de arquitectura y que es estudiada en todo el mundo.

El sitio oficial de la Casa sobre el Arroyo destaca "su estructura, planteada en tres dimensiones, netamente espacial" que configura "el primer intento de una estructura verdaderamente tridimensional que trabaja como un conjunto armónico integral y no como un grupo de piezas yuxtapuestas". "La lámina curva trabaja simultáneamente, por medio de los tabiques verticales, con la losa plana de la planta principal y con las barandas-vigas que la rodean. Estas barandas descargan los voladizos y llevan las cargas, a través de pórticos y tabiques a las fundaciones, contribuyendo a desviar hacia la tierra el empuje de la lámina curva", detalla la publicación.

Cabe resaltar que el interior de la casa está casi íntegramente construido en placa de madera; toda esta construcción fue realizada y montada como un conjunto en un taller de carpintería, luego fue desmontada y llevada a la obra donde se la armó definitivamente.