Cuáles son los países donde los productores rurales argentinos eligen invertir y por qué

Inflación de dos dígitos, cepos, mercados cambiarios complejos, dólar inestable, escasas políticas de mediano y largo plazo; el panorama argentino alimenta la incertidumbre y el desgano por invertir. Como el sector agropecuario del país siente esta inestabilidad económica, encontró una oportunidad tentadora: diversificar sus inversiones en campos extranjeros. 

El gobierno de Alberto Fernández y todos los ministros de Economía que tuvo no pudieron encontrar la fórmula para combatir la crisis, y la gestión de Javier Milei ya anunció fuertes ajustes para contrarrestarla. Los productores rurales de Argentina, ante esto, han visto al exterior en los últimos tiempos como una opción atractiva, permitiendo atenuar estos impactos y maximizar rendimientos, pero con sus riesgos, por supuesto.

Los países más tentadores para invertir 

“Hoy los productores argentinos cargan en su ADN más de 100 años de historia de producción agropecuaria, por lo que su presencia en campos extranjeros contribuye a un constante mejoramiento en la agroindustria de otras naciones", explicó Federico Nordheimer, CEO de Nordheimer Campos y Estancias. 

La inmobiliaria rural tiene venta de campos en varios lugares como Uruguay, Paraguay, Bolivia y Estados Unidos, los destinos más elegidos para esta inversión. No obstante, hay que comprender que cada país de la región tiene sus bemoles, por lo que va a depender del perfil del inversor y obviamente la relación entre riesgo y retorno. 

Si bien Uruguay tiene menos retorno, es uno de los países más estables de la región, según Nordheimer Campos. Paraguay es una frontera nueva que representa mayor retorno; la gente tiene sus resguardos, aunque los resultados de crecimiento y estabilidad de inflación son muy alentadores. Bolivia, por su parte, en los últimos meses ha presentado dificultades políticas que lo hacen más inestable y tiene valores de tierras muy competitivos. Como primera opción está siempre Estados Unidos, uno de los países más estables y con buen retorno; la barrera está en su lejanía, cultura e idioma. 

¿Por qué comprar campos en el exterior?

Esta maniobra a la que se lanzan algunos productores agropecuarios ofrece estabilidad económica y precios sin retenciones. Una evidencia clave son las empresas argentinas exitosas como Adecoagro, Cresud y Los Grobo, que tienen terrenos en el país, así como también en Uruguay, Paraguay, Brasil y Bolivia.

La diversificación puede estabilizar rendimientos en momentos de crisis. Sin embargo, es fundamental enfatizar en la importancia de estrategias de mitigación de riesgos. Comprar propiedades de calidad, diversificar tipos de campos y adoptar un enfoque a largo plazo son clave para minimizar riesgos. 

Generalmente los argentinos que están en el rubro se incursionan en el extranjero con campos agrícolas, gracias a su menor complejidad en comparación con campos ganaderos. Factores como el clima y la familiaridad con ciertas regiones son determinantes al seleccionar países para invertir. Mientras que, la adaptación gradual -entendiendo el sistema y la idiosincrasia local- se promueve como estrategia inicial para más adelante pensar en un expansión. 

Desde la inmobiliaria rural, de este modo, cerraron: “En el mercado actual, la diversificación de inversiones en distintos campos y países es esencial para enfrentar la volatilidad económica global. Aunque algunos países pueden destacarse en ciertos momentos, la estrategia es diversificar y pensar a largo plazo. Así como los productores diversifican cultivos en sus propios campos para mitigar riesgos climáticos y de precios de los commodities, los inversores argentinos buscan variedad geográfica para optimizar sus carteras y asegurar rendimientos sostenibles”.