Quiénes son los jueces que van a juzgar a los ocho acusados por el asesinato de Fernando Báez Sosa

La primera vez que la jueza María Claudia Castro compartió la sala de audiencias del Tribunal Oral N° 1 de Dolores con Fernando Burlando fue hace 26 años. Los reunió el caso del crimen del reportero gráfico José Luis Cabezas. Por aquel entonces, ella tenía menos de 30 y se desempeñaba como miembro del equipo de instrucción del juez Luis Macchi, fallecido en diciembre de 2018.

Hoy, a sus 54, volvió a coincidir con el abogado más mediático del país en un proceso judicial, pero esta vez las cosas son diferentes: ella es la presidenta del tribunal y él no defiende a los acusados, como lo hizo con “Los Horneros”, sino a Silvino Sosa y Graciela Báez, padres de la víctima, como querella de la causa.

De perfil bajo, pero con carácter, María Claudia Castro es respetada por sus colegas del Palacio de Justicia. Dicen entre pasillos que “se le reconoce su trayectoria”, que “no es una paracaidista” y que “dedica su tiempo a capacitarse”.

Castro nació en la localidad bonaerense de Azul, estudió derecho en la Universidad Nacional de La Plata mientras trabajaba en la Asesoría Letrada de la Policía de la Provincia. Se recibió en 1992, comenzó su carrera como ayudante letrado y ascendió minuciosamente hasta llegar donde está hoy. Años después de haberse recibido como abogada, hizo una Maestría en la Universidad Austral que, según pudo saber este medio, tiene fuerte orientación en la teoría de la coautoría funcional.

Castro fue la jueza que en 2017 condenó a prisión perpetua a los responsables de violar y asesinar a Javier Ayuso, un joven de la ciudad de Dolores cuya madre acompaña desde el 2 de enero a los padres de Fernando Báez Sosa.

El Tribunal que preside la jueza Castro está integrado también por Christian Abel Rabaia, como vicepresidente, y Emiliano Lázzari como secretario.

Rabaia estudió derecho en la Universidad Nacional de Buenos Aires entre 1995 y 2001. Es magistrado del Poder Judicial de la provincia de Buenos Aires desde hace más de 17 años, precisamente desde julio de 2005. Según informa en su perfil público de Linkedin antes de llegar a este lugar se desempeñó como abogado en un estudio jurídico propio, en la localidad de Quilmes desde marzo de 2002 hasta junio de 2005.

Emiliano Lázzari, por su parte, es el más joven pero también reconocido por su capacidad y experiencia. Oriundo de la localidad bonaerense de La Plata, estudió derecho en la Universidad Nacional de esa ciudad. Llegó a los Tribunales de Dolores por decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires, en 2018.

Juntos, Castro, Rabaia y Lázzari, decidirán si absuelven, como pidió la defensa, o condenan y a cuántos años a los ocho imputados por el asesinato de Fernando Báez Sosa.