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Abed, un compañero de fórmula con votos propios

Rodolfo Suarez terminó inclinándose por el intendente de Junín para completar el binomio. Se barajó elegir a una  mujer, pero ninguna de las posibles candidatas terminó por cerrar más allá de que Abed no dé el perfil de un dirigente con mirada de género. La importancia de un candidato a vice con votos propios y con llegada en el sector productivo.

jueves, 14 de marzo de 2019 · 22:40 hs

Lo pensaron, lo analizaron, cotejaron nombres y finalmente no lo hicieron. El precandidato a la gobernación que eligió Alfredo Cornejo, Rodolfo Suarez, terminó por anunciar hoy que Mario Abed será su compañero de fórmula en la carrera y declinó así la alternativa de que fuera una mujer la que integrara el binomio.

La discusión hasta hace días estaba planteada. “Sobre esto ya hemos hablado con Mario. Sabemos que hay que hacer consultas, no solamente con nuestro partido. Hay un debate en la sociedad, sobre todo con la ley de paridad. Hay voces que hacen su reclamo. No se trata de hombre o mujer sino de capacidades y visión de género. Puede haber mujeres que no lo tengan y hombres que sí”, dijo el intendente capitalino hace menos de una semana.

Si Abed tiene esa mirada o no, se sabrá con el correr del tiempo. El histórico cacique de Junín no ha dado muchas señales al respecto.

Quizás el nombre que más se acercaba al pensamiento de Suárez era el de la actual diputada Claudia Najul, pero no terminaba de ser una dirigente que terminara aglutinando el voto de la mujer que era, en definitiva, lo que les importa.

Abed cierra en la fórmula por varios lados. Y, sobre todo, hacia adentro del radicalismo. Casi nunca, salvo en los últimos meses, tuvo una relación fluida con Cornejo e incluso fue protagonista de un hecho inédito para el actual gobernador: fue uno de los pocos que le dijo que no, cuando Cornejo le ofreció candidato a diputado nacional en primer término en las elecciones de 2017.

Pero el gobernador lo había considerado hace rato. El juninense fue uno de los daños colaterales de la jugada para limitar las reelecciones indefinidas de los intendentes y la designación de ahora se convierte en forma de pago.

No fue decisivo a la hora de la decisión final de que tomó Suarez, pero que lo hayan designado a Abed también es una señal hacia Julio Cobos que ayuda en la campaña. Con su apoyo, Cleto fue el que le dio al “Rody” el envión final en el momento en que Cornejo tuvo que decidir a quién ponía como delfín.

Suarez siempre se sintió cómodo con la posibilidad de que sea Abed el que se instale en la Legislatura en caso de que llegue a la gobernación. Lo trató como un dirigente que llega desde el interior de la provincia y que, además, cosechó lazos con el sector productivo que hoy tiene una relación mala con el gobierno provincial.

Abed tiene votos propios, hay que decirlo. Mide bien en el este y en el resto obtiene una buena performance en los circuitos productivos. Se sabe que la mira del oficialismo está en el sur, ya que entre el electorado urbano la candidatura de Suarez aparece como consolidada.

Cornejo cumplió con lo que se autoprometió con respecto al que venga, es decir, no interferir en las decisiones que se tomen más de lo necesario. Y en ese sentido operó con Suarez, quien eligió sin demasiada presión. "Te puedo dar mi punto de vista. Pero el que decide sos vos", cuentan que le dijo el gobernador al elegido.