Coronavirus: ¿Fin de la grieta y medios más creíbles que las redes?

Un supuesto audio del médico Claudio Burgos que resultó falso. O lo que suponíamos era un mensaje del exministro de Salud, Sergio Saracco, criticando al gobierno por su accionar frente al coronavirus y advirtiendo sobre el colapso del sistema sanitario de Mendoza que, después supimos, el especialista epidemiológico jamás había grabado.

La circulación por miles de teléfonos en la provincia de que, en realidad, más allá de lo que aseguran las autoridades, la enfermedad ya está circulando entre nosotros con casos confirmados pero no comunicados... Mentira también.

“Dos niños chinos provenientes de Europa están aislados en el Hospital Notti con síntomas de coronavirus”. “Traten de no ir al Perrupato porque ahí ya hay cuatro personas con coronavirus”, fueron algunos otros audios que se viralizaron y que tuvieron que ser desmentidos a nivel oficial.

El más fake y sintomático a la vez, porque circuló entre nosotros pero también en buena parte del mundo de habla hispana: “Esta noche a partir de las 11pm nadie podrá estar en la calle, cerrar puertas y ventanas. 5 helicópteros de la Fuerza aérea pulverizarán desinfectante como parte del protocolo para erradicar el Coronavirus”, alarmaba el texto. Por supuesto que las naves no aparecieron en la noche de Mendoza porque nunca fue verdad lo que mucha gente terminó reenviándole a otra.

Uno de los bolazos más grandes, sin dudas, fue enterarnos que Nostradamus ya había predicho hace siglos que esto que nos está pasando nos iba a pasar. Desde hace una semana circula en en Facebook y WhatsApp una imagen que sostiene que el médico francés predijo, en 1555, el coronavirus a través de su siguiente texto: “Y en el año de los gemelos/surgirá una reina/desde el Oriente/que extenderá su plaga / de los seres de la noche/a la Tierra de las 7 colinas/transformando en polvo a los/hombres del crepúsculo/para culminar en la sombra de la ruindad”.

Nos encanta Nostradamus y nos fascina como, hace más de 500 años, según muchos creen, anticipó varios de los cataclismos que se abatirían sobre la humanidad después. Pero nada dijo de este mal que nos preocupa ahora. El sitio chequeado.com determinó que, en el libro Profecías de Nostradamus, no aparece ningún texto con las palabras que ahora se difunden.

Las redes sociales funcionan como usinas informativas y en muchos casos son útiles para sacar a la luz algo que un gobierno o los medios de comunicación pueden tener intención de ocultar. Sin embargo, por lo que observamos hasta aquí, la información que surge por parte de las autoridades con respecto al coronavirus en la Argentina es creíble y se está transmitiendo de manera transparente.

Al menos así lo están reflejando un puñado de encuestas realizadas a principios de esta semana, fundamentalmente en el área metropolitana de Buenos Aires, y que marcan un comportamiento por parte de la sociedad muy definido en este sentido.

Una de ellas fue la realizada por Raúl Aragón y Asociados, quien detectó que la aparición de Alberto Fernández el domingo por la la tarde, en la conferencia de prensa en la que el presidente anunció las primeras medidas drásticas para prevenir el coronavirus, fue catalogada entre “Buena” y “Muy Buena” por el 83% de los consultados.

Pero hubo más. En un país que acostumbra a desconfiar de sus gobernantes y de su clase dirigente, existe un amplio respaldo a las medidas tomadas hasta aquí.

El 90% está de acuerdo con las restricciones al tránsito, casi el 92% se mostró entre “algo de acuerdo” y “totalmente de acuerdo” con que se hayan suspendido las clases, el 94% vio con buenos ojos la suspensión de los espectáculos públicos y por una amplía mayoría, el 99%, se celebró el criterio de cerrar las fronteras. En este último punto, claro está, afloran otros tipos de sentimientos.

¿Cómo calificaría el tratamiento que vienen dando los medios al problema del coronavirus”, fue otra de las preguntas de la consultora en este sondeo. Casi el 65% expresó que oscilaba entre “Bueno” y “Excelente”, un 25% lo consideró “ni bueno ni malo” y un 10% lo cuestionó.

“Los medios suelen ser cuestionados porque informan demasiado, o porque ocultan información, o porque exacerban los miedos. Pero en este caso no, hubo un acuerdo positivo”, analizó Federico González, uno de los responsables del sondeo de la consultora Aragón.

Desde ya que el coronavirus nos llevó a un cambio de hábitos repentino y trepó prácticamente al tope de nuestras preocupaciones cotidianas, por encima del desempleo, la inseguridad y los bajos ingresos y por debajo de la inseguridad.

Pero podría tener un impacto positivo a largo plazo: tanto las valoraciones que la sociedad está haciendo de las medidas tomadas, del accionar del gobierno nacional, como de la actuación de los medios, se hace sin “ostensibles grietas ideológicas”. Es decir, la gente las valora más allá de cuál fue su decisión de voto en 2019.

“Todas las últimas encuestas que hicimos sobre cualquier tema, cuando las cruzábamos con la intención de voto anterior, veíamos dos universos invertidos y opuestos. En cambio acá, cuando cruzábamos las respuesta con el voto anterior, en ningún caso hubo grieta. Son muy parecidos los patrones de respuesta entre quienes votaron a Mauricio Macri o Alberto Fernández. La gente estaba esperando eso, que más allá de las diferencias, trabajar unidos es mejor que no hacerlo de esa manera”, sintetizó González.

En Mendoza, Rodolfo Suarez también se puso al frente del problema, aunque con algunas dificultades notorias en la comunicación que lo siguen obligando, por caso, a seguir anunciando medidas a través de de su cuenta de Twitter. Sin embargo no hay por qué dudar acerca de que, por ahora, no hay casos registrados en la provincia del virus, como se está transmitiendo por los canales oficiales.

Es verdad que el lunes se tomaron decisiones en conjunto con todos los intendentes, incluidos los del PJ.  Pero da la impresión que la grieta todavía no se supera y que aún se notan las heridas que dejó entre el debate por el Presupuesto que, aunque pareciera que haya pasado un año, culminó hace una semana nada más.