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El Camino: Breaking Bad volvió en toda su gloria

La película que cuenta la historia de Jesse Pinkman tras el final de Breaking Bad representa un epílogo ideal para una serie que marcó una época. Este artículo <b>TIENE SPOILERS</b> de la producción estrenada este viernes y de Breaking Bad, estrenada en el 2008.

sábado, 12 de octubre de 2019 · 14:05 hs

Breaking bad volvió ayer a Netflix con la película El Camino, una especie de epílogo que buscaba cerrar la historia de Jesse Pinkman, el acompañante de Walter White cuya suerte quedó en el aire tras el final de la afamada serie. Hacer una película tras un final casi cerrado era arriesgado, pero Vince Gilligan, creador de Breaking bad, y escritor y director de la película, consiguió darle un final (otro) perfecto a una producción que ya había alcanzado el estatus de legendaria.

Hay diferentes formas de ver El Camino: una película de Breaking Bad. La primera es como el final final de la serie que influyó a todas las series desde su estreno. El Camino le da un cierre que le faltaba a Breaking bad, el de Jesse, el segundo personaje más importante, y sin dudas el más querido. La última escena lo mostraba escapando a toda velocidad en el Chevrolet El Camino que le da título a la nueva producción. Pero no mostraba nada más. Lo que le pasaba era una incógnita.

También se puede ver como Breaking bad sin Walter White. Heisemberg era por lejos la figura más poderosa de toda la entrega, y su muerte dejó un vacío imposible de llenar. ¿Qué puede pasar en un universo sin el profesor White? La respuesta está en la película, y es menos impresionante de lo que parece: el mundo sigue girando. Jesse tiene que luchar para escapar de la policía como cuando era el criminal de poca monta que no tenía nada para ofrecerle al mundo.

Probablemente la mejor manera de ver El Camino sea como fanático. La película no escatima en guiños y referencias a la serie y, en el peor de los casos, es una oportunidad -probablemente la última- de ver a los personajes que nos fascinaron instantáneamente tras su aparición. En el nuevo film están -casi- todos: Badger, Skinny Pete, el mismísimo Walter White, Todd y, por una razón que ni siquiera se intenta explicar, Mike.

La película en sí está, como no podía ser de otra manera, escrita de una manera excelente. Hace acordar a los mejores capítulos de la serie, aunque, claro, le falta algo. Si hay una posible falencia en El Camino, es la ausencia -ineludible- de Heinsemberg. La aparición de Walter en un flashback deja gusto a poco, aunque es un gesto que los fans aprecian. La aparición de Jane -la ex de Jesse que el genio de las metanfetaminas deja morir- en cambio, suena a reparación.

Jesse y Jane, antes de la tragedia.

El Camino probablemente no tenga el impacto que tuvo en su momento Breaking bad, pero no hace falta. Es simplemente una caricia a los fans, inesperada e irrepetible.