El increíble motivo por el que las plantas del jardín presentan manchas negras en las hojas

Por más que prestemos mucha atención al cuidado de las plantas del jardín, en ocasiones, estos cuidados pueden ser excesivos, consiguiendo el efecto contrario al esperado. Un ejemplo de esto es cuando las hojas presentan manchas negras por exceso de riego, lo cual puede provocar la pudrición de las raíces y, como consecuencia, daños en las hojas. Aunque también puede tratarse de enfermedades fúngicas. Lee la nota para saber las causas y cómo revertir la situación.

Uno de los principales culpables es el hongo conocido como mildiú polvoriento o botrytis. Este hongo prospera en condiciones de alta humedad y temperaturas moderadas. Sus manchas negras se desarrollan en las hojas y pueden extenderse rápidamente si no se tratan adecuadamente.

Otra posible causa es la roya, un hongo que provoca manchas negras en las hojas junto con una capa de esporas en la parte inferior. La falta de ventilación, humedad excesiva y la cercanía entre las plantas pueden favorecer la propagación de esta enfermedad. Las manchas negras también pueden ser resultado de daños causados por bacterias, como la "mancha bacteriana". Estas manchas suelen ser más angulosas y con bordes más definidos que las causadas por hongos.

Cómo sanar las hojas negras de las plantas

Como prevención, los expertos de “Ecología Verde” aconsejan llevar a cabo la poda de las plantas para mejorar la circulación del aire y el control de la humedad. Además, el uso de fungicidas y bactericidas específicos puede ser necesario para combatir infecciones. Es importante elegir los productos adecuados y seguir las instrucciones con precisión. Lo mejor es que existen métodos caseros para quitar los hongos de las plantas, sin gastar mucho presupuesto en ello.

Para hacer el insecticida y fungicida, lo primero que necesitas es picar al menos cinco dientes de ajo. Pon la medida de un vaso con agua a hervir. En otro recipiente, pon una medida de vinagre blanco y 10 partes de agua. Una vez hervida el agua, agrega los ajos picados por cinco minutos. Finalmente, se añade el gua de ajo, con ayuda de un colador, a la mezcla de vinagre. Y así tendrás listo el fungicida casero que puedes rociar sobre las plantas afectadas una vez que se vaya el sol.