Muy esponjoso: prepara un delicioso bizcocho tres leches ¡en pocos pasos!

La esponjosidad y humedad de un bizcocho son las claves para que sea un éxito. Originario de México, este bizcocho tres leches recopila las dos características principales de esta preparación, convirtiéndose en una receta muy elegida a lo largo del mundo.

Esta receta combina el sabor de las leches y da por resultado un bizcocho muy sabroso que podemos utilizar como base de nuestras tortas o incluso hacerlo en moldes individuales. Ya sea para disfrutarlo con crema chantilly, dulce de leche o merengue, este bizcocho tres leches es una opción muy efectiva para cualquiera sea nuestro propósito.

Ingredientes:

Para el bizcocho:

• 120ml de leche 
• 5 Huevos L 
• 200g de harina de trigo común todo uso 
• 150g de azúcar blanca 
• 1 cucharadita de esencia vainilla 
• 1 cucharadita de polvo de hornear 
• Ralladura de un limón 

Para la salsa tres leches: 

• 250ml de leche condensada 
• 250ml de leche evaporada (Carnation o Clavel) 
• 250ml de nata o crema de leche

Preparación:

Comenzamos separando las claras de las yemas. En un bowl montamos las claras durante cinco minutos hasta que espumen, en ese punto agregamos la mitad del azúcar y seguimos batiendo hasta que monten por completo. Las separamos y continuamos con las yemas.

Batimos junto con el resto del azúcar hasta que se aclaren y agregamos la esencia de vainilla y la ralladura del limón. Continuamos batiendo unos segundos más hasta que se integren. Agregamos la leche e integramos.

Luego incorporamos de a poco y con movimientos envolventes las claras ya montadas. Por último añadimos la harina junto al polvo para hornear e incorporamos con movimientos envolventes, esto hará que no se pierda el aire de la mezcla.

Llevamos a cocinar a un horno precalentado a 180º durante 40 minutos en un molde enmantecado y enharinado. Lo dejamos enfriar durante 10 minutos antes de desmoldar. Dejamos enfriar por completo.

Para la mezcla de leche basta con mezclar bien los tres tipos de leches en un bowl. Colocamos el bizcocho nuevamente en el molde cubierto con papel film y le hacemos pequeños cortes con un cuchillo para que la mezcla de leches se impregne en el bizcocho. Con ayuda de una cuchara cubrimos bien todo el bizcocho con la mezcla de leches y dejamos reposar toda la noche.

Pasado este tiempo, desmoldamos con cuidado y podemos reservar un poco más de la mezcla para agregar por la parte de abajo y darle más humedad. ¡Y listo! 

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