Entre alarmas y refugios: el testimonio de una argentina en Israel
Junto a su esposo, hace nueve años está en Israel, donde también viven su hijo y sus nietos. Contó cómo se vivieron estos últimos días de ataques en el país.

Desde el viernes, varias ciudades de Israel han sufrido importantes ataques por parte de Irán
EFEEstela es una argentina que, junto a su esposo, vive hace nueve años en Israel, en una ciudad ubicada a casi una hora de Haifa, una de las localidades que fue atacada por Irán. En una conversación con MDZ, contó cómo se vivieron estos días de tensión en la zona donde reside, cómo se prepara ante una alerta de ataque y por qué, aun en este contexto, sigue eligiendo quedarse en el país.
"En general, es una zona mucho más tranquila que el resto, donde se ve tanta movida con esta situación. Acá es mucho más tranquilo, por suerte", comenzó explicando Estela sobre el lugar donde vive, una zona cercana a la ciudad de Haifa, ubicada en el norte del país, que afortunadamente no se vio tan afectada como otros puntos de Israel.
Te Podría Interesar
Además, mencionó que en algunos barrios, principalmente en los más nuevos, todas las casas cuentan con un refugio integrado, como una habitación más. "En general, todas las viviendas nuevas tienen un refugio, entonces no tenés que correr o ir a buscar dónde resguardarte. Nosotros tenemos el refugio acá, es uno de los cuartos de la casa, y cada departamento tiene el suyo. Entonces, la gente está muy cuidada y muy protegida en ese sentido".
Algo que también sucede con uno de sus hijos y sus nietos, que al igual que ella viven en Israel, en un kibutz donde también tienen un refugio propio.
Cómo se viven los ataques
Luego explicó cómo funciona el protocolo ante un ataque. "La mecánica es que el gobierno manda un mensaje avisando que tenés que estar cerca de un lugar de seguridad, de un refugio. Si es posible, pasa más o menos media hora y, cuando suena la alarma, vos ya sabés que tenés que ingresar al refugio. Por lo general, tratamos de tener agua, los teléfonos y los cargadores".
"Ahí hay que esperar hasta que deja de sonar la alarma, y te mandan un mensaje diciendo que ya podés salir. Cuando recibís ese mensaje, salís y seguís con tus cosas. Se sigue con ritmo normal, pero el mal rato de la alarma lo pasás, qué va a ser".
También expresó: "No es fácil, porque te estresa y te inquieta el hecho de que vos sabés que en cualquier momento va a venir un ataque de afuera".
Los ataques comenzaron el viernes. Desde entonces, Estela y su esposo eligen dormir en el refugio. "Estas tres últimas noches, con las alarmas y los avisos de que hay que protegerse, estamos durmiendo directamente en el refugio. Al igual que mucha gente que tiene la suerte de tener uno, lo usamos para estar más tranquilos".
La posibilidad de regresar a Argentina
Estela, de 66 años, si bien relató el mal momento que le toca atravesar ante cada alerta y el estrés de refugiarse al escuchar una sirena, aclaró que, aun así, no podría dejar de vivir en Israel.
"Nosotros, a pesar de todo lo que pasa, no tenemos pensado volver a Argentina, más allá de que es nuestro país de origen. Estamos acá, cerca de nuestro hijo y de nuestros nietos. Hemos hecho amistades y tenemos una vida tranquila. Salvo cuando pasa una situación como esta, nuestra vida es muy tranquila, y por ahora no se nos ha cruzado por la cabeza la idea de volver".