Temen una escalada de violencia en Colombia los próximos días

En los últimos días se desencadenaron protestas en varias ciudades de Colombia contra la reforma tributaria inconsulta de Iván Duque. Si bien el gobierno retiró el proyecto, los reclamos económicos y sociales se acumulan entre los manifestantes. Durante la jornada del jueves el presidente colombiano propuso abrir diálogo con el Comité Nacional del Paro, pero se rehúsan a sentarse a la mesa si no hay un reconocimiento oficial de que entre la represión y los disturbios, al menos 24 personas murieron y más de 800 resultaron lesionadas.

A pesar de que se intenta censurar la información que dé cuenta de los hechos de violencia acontecidos en Colombia, desde MDZ Radio pudimos dialogar con Fernando Posada, politólogo colombiano y columnista de opinión del diario El Tiempo.

Entre Cali y Bogotá, el politólogo cuenta que luego de una semana de protestas "ambas ciudades han quedado en una delicada situación". Ayer se dio a conocer la autorización para que los líderes del comité del paro asistan a una reunión con el presidente y la vicepresidenta, Marta Lucía Ramírez. Sin embargo, el periodista aclara que la invitación es a dialoga y no a "negociar algún tipo de agenda que lleve a soluciones".

Lo que han dicho los líderes de distintos movimientos políticos que han sido invitados a este diálogo, es que mientras se mantengan los hechos de violencia policial que se han documentado a lo largo del país, no se sentarán a conversar. El mínimo de requerimientos es que cese la violencia.

La Defensoría del pueblo informó hace un par de días que 89 personas permanecían desaparecidas. "Si bien muchas de ellas aparecieron, hay una forma de violencia policial que ha llamado la atención de las Naciones Unidas, la Unión Europea, el gobierno de Estados Unidos". A pesar de la atención internacional y el pedido expreso para iniciar el diálogo de cesar la violencia, "el gobierno colombiano no se ha pronunciado en ningún momento siquiera para solidarizarse con las víctimas de más de 20 colombianos que han muerto producto del abuso policial".

"Lo que necesitamos ahora en Colombia es que todos los sectores se pongan de acuerdo en lo básico -sentenció Posada- que son por lo menos tres puntos esenciales". Primero los bloqueos y las manifestaciones deben tener corredores humanitarios para que no haya desabastecimiento de alimentos y para que las personas que se trasladan adentro del país puedan hacerlo. En segundo lugar que la violencia de todos los sectores debe ser condenada. El gobierno no puede seguir en silencio frente a los casos documentados de violencia policial. Y los líderes políticos que motivan y defienden el paro nacional tienen que ponerse de acuerdo en seguir rechazando con mayor contundencia aún la violencia que se contra miembros de la fuerza pública de parte de algunos de los manifestantes.

Un elemento importante a destacar es que el paro nacional que tiene lugar en Colombia es un grupo heterogénero. Conviven reinvindicaciones de distinto orden porque participan "sectores sindicales, sociales, estudiantiles y ciudadanos de común en el que cada uno tiene su propio pliego". Un ejemplo de ello es el fuerte reclamo del sector docente de ser incluido como prioritarios para recibir la vacuna de manera que se puedan retomar las clases presenciales.

La tensión no cesa. Los principales actores políticos debieran promover que se finalice el paro -opinó Posada- porque si esto no sucede en los próximos días, "el panorama es absolutamente desalentador en sentido de violencia y de desabastecimiento de alimentos, oxígeno, combustible y tantas otras cosas vitales que ya faltan en varias ciudades. Para ello el gobierno tiene que brindar garantías de posibilidades reales de cambio".

Escuchá la entrevista completa con Fernando Posada para conocer más detalles sobre la actualidad política, económica y social de Colombia, haciendo click acá.