Ford se queda en Argentina porque somos potencia en la industria automotriz. Los detalles
La automotriz Ford anunció que deja Brasil pero que seguirá sin cambios en Argentina y ratificaron una inversión de casi 600 millones de dólares que tenían prevista aquí. Sobre esto, hablamos con el economista Carlos Burgueño quien nos explicó a qué se debe la decisión.
La empresa automotriz Ford anunció ayer que que cerrará sus tres fábricas de automóviles en Brasil. Van a continuar abasteciendo a ese mercado pero con vehículos importados de Argentina y Uruguay, entre otros países.
En ese mismo sentido, Ford dijo que en Argentina "los planes se mantienen sin cambios y está ratificada la inversión por US$ 580 millones anunciada en diciembre" para fabricar la nueva Ranger en la planta bonaerense de General Pacheco. Sobre esta excelente noticia económica hablamos con nuestro columnista Carlos Burgueño.
Según Burgueño la decisión se debe a que Argentina se está convirtiendo en una potencia en la producción de camionetas. "Las mejores camionetas del mundo para trabajar se están haciendo acá, a un nivel internacional. La primera fue Toyota con la Hilux, después vino VolskWagen con la Amarok y luego las otras", comentó.
Lo que sucede, según el economista, es que todas las terminales de nuestro país lentamente se están especializando en producir camionetas. Además, esos rodados se están vendiendo fuera del Mercosur, porque a "Argentina lo que le sucede es que tiene un régimen que comercializa fundamentalmente dentro del Mercosur y los productos son competitivos dentro de él".
"Pero lo que pasa también es que la industria automotriz se está convirtiendo en mega tecnológica, con autos eléctricos y con una tecnología apabullante. Argentina, Polonia, Sudáfrica y la India no pueden seguir ese tren, entonces las terminales quieren especializarse", continuó detallando Burgueño, quien además celebró "que nuestro país lo haya logrado, siendo un lugar tan complicado, es casi un milagro".
Entre risas pero con un alto grado de realidad, el economista dijo: "Yo estoy de rodillas rezándole al destino para que el gobierno, ni este ni ninguno, no destruya esto que logró la industria automotriz argentina". Además reiteró que "Ford no se va del país porque va a fabricar una camioneta, no por el Ford K".
En aquel sentido, Burgueño concluyó: "Yo no sé si las automotrices quieren que esto se conozca, porque en cuanto se sabe lo podemos destruir en un mes. Son capaces de hasta ponerle restricciones. Yo diría: ´no lo toquen, déjenlo así´".