Toyota fabricó la primera pick-up que funciona a hidrógeno
La firma nipona aprovechó sus conocimientos y desarrollos para presentar un prototipo inédito de su conocida pick-up.
En un esfuerzo por liderar la transformación hacia vehículos más limpios y sostenibles, Toyota ha dado un importante paso en el desarrollo de tecnologías de hidrógeno. Hace unos meses, la marca japonesa anunció un proyecto ambicioso en colaboración con el gobierno británico: la creación de una Toyota Hilux que funciona a hidrógeno.
El proyecto estuvo financiado en parte por el Centro de Propulsión Avanzada de Reino Unido, un organismo público comprometido con el fomento de tecnologías más limpias y sostenibles.
La base de esta revolucionaria Toyota Hilux es un modelo diésel estándar, pero su transformación es notable. Toyota ha reemplazado el motor de combustión y todos los componentes relacionados (como el depósito de combustible) por un sistema de pila de combustible basado en el que utiliza el conocido y consagrado Toyota Mirai de producción. Esta pila de combustible utiliza hidrógeno para generar electricidad, que luego alimenta un motor eléctrico para propulsar el vehículo.
Los ingenieros de Toyota ubicaron tres tanques de hidrógeno a alta presión debajo de la cabina, mientras que el motor de pila de combustible se encuentra en la posición original del motor de combustión, es decir debajo del capó.
De esta manera se logró mantener el chasis original de largueros y travesaños, para conservar así la robustez característica de la Toyota Hilux. Además, la batería se encuentra en la caja, justo detrás de la cabina, optimizando el espacio y el equilibrio del vehículo.
Uno de los aspectos más sorprendentes de esta Hilux a hidrógeno es su autonomía. Desde la marca declararon 600 kilómetros con una sola carga de hidrógeno, superando así con creces a la mayoría de las pick-ups eléctricas disponibles en el mercado actual.
Esta cifra es especialmente significativa en un momento en que la industria busca extender la autonomía de los vehículos eléctricos y reducir la dependencia de los combustibles fósiles.
Este prototipo no solo representa un logro técnico, sino también un paso adelante en la apuesta de Toyota por el hidrógeno. Además de desarrollar modelos de pila de combustible, como el Mirai, la compañía japonesa está trabajando en motores de combustión de hidrógeno tanto para uso en carretera como en competición. La Toyota Hilux a hidrógeno es un ejemplo más de su compromiso con la innovación y la sostenibilidad en la industria automotriz.