El simple ejercicio para eliminar el dolor de espalda, según la ciencia
El dolor de espalda es una de las dolencias más comunes en todas las edades, afectando a millones de personas en todo el mundo. A la hora de buscar soluciones efectivas, un reciente estudio de la ciencia ha identificado un simple y accesible ejercicio que podría ser la clave para aliviar este problema: caminar.
Se sabe que una de las recomendaciones tradicionales para quienes padecen dolor lumbar es realizar ejercicio como parte de su tratamiento. Sin embargo, hasta la fecha, no existían estudios clínicos que evaluaran específicamente el impacto de una actividad tan simple en la reducción de este tipo de dolor.
Por este mismo motivo, un equipo de científicos australianos decidió llenar este vacío con una sorpresiva investigación. El estudio incluyó a 701 participantes que sufrían de dolor de espalda no atribuido a lesiones ni enfermedades específicas.
Los participantes fueron divididos en dos grupos: uno de control, que no recibió instrucciones específicas sobre el manejo de su dolor, y otro grupo experimental que asistió a sesiones con un fisioterapeuta. Se profundizaron los orígenes del origen del dolor lumbar y se les recomendó caminar durante 30 minutos diarios, cinco veces por semana.
El objetivo era observar la efectividad de las caminatas en la reaparición del dolor de espalda. Los resultados mostraron una diferencia notable: el grupo de control, que no siguió ninguna recomendación específica, experimentó la reaparición de molestias en promedio a los 112 días; mientras que aquellos que incorporaron la caminata regular en su rutina diaria reportaron el regreso del dolor en 208 días de promedio.
Esta diferencia significativa, casi el doble del tiempo, demuestra que el simple acto de caminar puede tener un impacto considerable en la gestión del dolor de espalda. Si bien los resultados son claros, los investigadores aún no han identificado la causa exacta por la cual caminar resulta tan beneficioso para aliviar el dolor de espalda.
Tras este análisis, se ofrecieron algunas hipótesis para combinar a la caminata, entre las que aparecen sumar movimientos y el fortalecimiento de los músculos de la columna vertebral, así como la liberación de endorfinas, hormonas que contribuyen a la reducción del estrés y al aumento del bienestar general.
Los resultados sugieren que caminar puede ser una herramienta poderosa para mejorar la calidad de vida. Si bien no es concluyente, al menos se planta como un punto de partida para explorar más a fondo qué hay detrás de este efecto positivo y sugerir tratamientos para combatir estos dolores.