Jardín: cómo combatir las plagas de tus plantas usando naranjas
Existe un truco casero y natural para mantener alejadas a las hormigas y otros insectos de tu hogar. ¿Qué uso puedes darle a tus naranjas podridas?
Si eres víctima de una indeseable invasión de hormigas en tu jardín y estás buscando una solución efectiva, te contamos que las naranjas podridas pueden convertirse en grandes aliadas. Este método casero que te compartimos no solo es económico, sino también ecológico, ya que utiliza restos de alimentos que de otra manera se desperdiciarían.
¿Cómo hacer que las naranjas que han comenzado a pudrirse se transformen en repelentes naturales? Gracias a un hongo específico que crece en ellas: el Penicillium. Por eso, si notas que tienes en tu alacena o heladera algunas de estas frutas que comenzaron a ponerse viejas, no las tires ya que puedes reutilizarlas en tus plantas.
Este moho que se empieza a formar, de la división Ascomycota, tiene una serie de propiedades que son repelentes para estos insectos. A continuación te contamos dos métodos sencillos para utilizar las naranjas podridas y proteger tu jardín de estos visitantes dañinos.
Primer método: La naranja troyana
Reúne todas las naranjas que ya no están aptas para el consumo y presentan moho visible. Colócalas cerca de la entrada de los hormigueros. La idea es que las hormigas se sientan atraídas por el cítrico y lleven partes de la fruta contaminada con Penicillium de vuelta a su nido.
Una vez dentro del hormiguero, el moho comenzará a interactuar con el ambiente interno del nido, creando condiciones que obligarán a las hormigas a buscar otro lugar para establecerse, alejándolas de tus plantas y obviamente de tu jardín. Una fórmula súper eficaz.
Segundo método: Riego de Penicillium
Coloca varias naranjas podridas en un recipiente con agua. Usa un palo o una herramienta para mezclar bien, asegurándote de que el Penicillium se libere en el agua. Una vez que las naranjas se hayan desintegrado y el moho esté bien mezclado dentro del recipiente, cuela la mezcla para eliminar los sólidos, obteniendo un líquido rico en Penicillium.
Luego utiliza esta agua filtrada para regar las plantas afectadas por las hormigas. Esto actuará como una barrera natural, repeliendo los insectos y protegiendo tus plantas. Con esto generarás una especie de cerco, una barra protectora para alejar estos bichos.
¿Qué beneficios genera utilizar naranjas podridas? Es una solución completamente natural, por lo que no dañará tus plantas ni contaminará el suelo. Además reutiliza las frutas que de otro modo tirarías, promoviendo la sostenibilidad. Por otro lado, es un método económico que no requiere la compra de productos químicos costosos o potencialmente dañinos.
Recomendaciones: Luego de aplicar cualquiera de estos métodos, monitorea regularmente las áreas afectadas para asegurar que las hormigas se han alejado. Si las hormigas regresan, no dudes en repetir el proceso para mantenerlas a raya.