De esta forma no faltará romero en tu casa: un truco infalible

El romero además de ser un condimento también tiene propiedades medicinales y es utilizado en la aromaterapia. Por esta razón, tener romero fresco en casa puede ser muy beneficioso para la salud en general. Una forma sencilla de que nunca falte en tu hogar es reproducirlo a través de esquejes. 

Esta técnica es una de las más simples y efectivas para multiplicar tus plantas de romero. Para reproducirlo a través de esquejes, necesitas conseguir una rama fresca de aproximadamente 15 centímetros de largo. Es importante que la rama sea saludable y tenga hojas verdes.

Retira algunas hojas de la base del esqueje para facilitar el enraizamiento. Deja al menos un par de hojas en la parte superior para que la planta pueda seguir realizando fotosíntesis. Llena un vaso con agua y coloca el extremo cortado del esqueje dentro del agua, procurando que no toque el fondo del recipiente. Es importante cambiar el agua cada dos días para evitar que se pudra el tallo.

Después de aproximadamente dos semanas, tu esqueje debería haber desarrollado una buena cantidad de raíces. En este momento, estará listo para ser trasplantado a tierra. Prepara una maceta con sustrato con buen drenaje y coloca tu esqueje en ella, cubriendo las raíces con tierra suavemente. Riégalo bien después del trasplante.

Durante los primeros días después del trasplante, coloca tu planta en un lugar sombreado o con luz indirecta para que se adapte al nuevo entorno. Además de reproducirlo a través de esquejes sumergidos en agua, también puedes multiplicar tu romero mediante otros métodos como la división de matas o la siembra directa de semillas. Cada método tiene sus particularidades y ventajas, por lo que puedes probar diferentes técnicas para encontrar la que mejor se adapte a tus necesidades y preferencias.