Así es el rancho de Ángela Aguilar por dentro

Ángela Aguilar es una de las integrantes más jóvenes de la Dinastía Aguilar y una de las herederas del famoso rancho El Soyate, en Zacatecas, que construyeron sus abuelos: el cantante Antonio Aguilar y la actriz Flor Silvestre. El interior de la propiedad se pudo ver, en muchas ocasiones, gracias a las fotos que publica en sus redes sociales y a varias entrevistas que hizo la familia.

La historia del rancho nació cuando Antonio Aguilar quiso sorprender a su amada construyendo una propiedad a su medida y Flor Silvestre una vez recordó lo que le dijo cuando se casaron: "Me dijo 'yo te voy a construir tu casa' y así lo hizo". Para llevar adelante este proyecto compró un terreno en el poblado Tayahua, municipio de Villanueva.

Uno de los espacios más importantes de El Soyate es el establo, ya que la pasión de ellos eran los caballos, algo que pasó de generación en generación. La pareja se levantaba a las cinco de la mañana para cabalgar y llevaban comida porque siempre volvían a altas horas de la noche.

“Tengo retratos de él por todos lados, está él en cada ladrillo y en cada cosa de esta casa...En mi casa puso flores de cantera por todos lados para que nadie se atreviera a dudar que la casa la había construido para su flor... Vivo de su recuerdo... Es lo más grande que hay, que tu pareja sea parte de ti mismo, no éramos dos, éramos uno...", dijo la cantante antes de fallecer.

¿Cómo está hoy el rancho de la Dinastía Aguilar?

Cabe recordar que Flor Silvestre tuvo tres hijos antes de conocer a Antonio Aguilar, pero ellos no tienen ninguna acción legal sobre el terreno, debido a que la propiedad fue comprada por El Charro de México. Los herederos naturales fueron Pepe Aguilar y Antonio Aguilar Jr. (los hijos que tuvieron en común), quienes, a su vez, comparten todos sus bienes con sus hijos.

Ángela Aguilar es una de las futuras dueñas del rancho y pasa allí mucho tiempo, incluso tiene a su caballo negro Troyano en el establo, un potro de pura raza española. También hay una caballeriza donde cuidan a los animales que utilizan para todos sus shows y se puede ver cómo los cuidan constantemente.

En las fotos que publica en las redes sociales, se ven grandes cantidades de fuentes y paredes de ladrillo que mantienen la esencia del rancho. Pepe y Antonio Aguilar no quisieron remodelar las instalaciones ni tirar los objetos para tener todos los recuerdos posibles de sus padres, quienes están sepultados en la capilla que construyeron a metros de la casa principal.

Ángela Aguilar pasó allí toda su infancia y, sin duda, tiene grandes anécdotas de sus abuelos, quienes fueron personas muy importantes para ella. El Soyate hoy es una imagen vívida de la época dorada de Antonio Aguilar y Flor Silvestre, un terreno que seguirá pasando entre todos los descendientes. ¿Te gustaría conocerlo?