Menos vuelos de cabotaje: solo hay 1 de cada 4 que había en 2019

Ante el inicio de las vacaciones de invierno, las perspectivas para el sector turístico no son las mejores. Las demoras en autorizar la temporada invernal, el retraso en el plan de vacunación y la situación económica, no generan un marco propicio para decidir viajar. El titular de la Cámara Argentina de Turismo, Aldo Elías, estimó que el nivel de ocupación general del sector rondará el 40%.

Un dato que muestra la menor actividad que se espera para las próximas semanas es la caída de pasajeros en los vuelos de cabotaje en los últimos meses, respecto a la situación que se vivía antes de la pandemia. Concretamente, contra el período invernal previo de las vacaciones del 2019.

En junio pasado, hubo en el país 2.695 vuelos internos, según los últimos datos difundidos por la ANAC, mientras que dos años atrás se habían realizado 11.239. Es decir que, en la actualidad, el volumen de operaciones es del 24% respecto a 2019 o uno de cada cuatro vuelos que había en ese momento. Un dato a tener en cuenta es que el nivel de ocupación de los vuelos va de 40% a 70%, según cada empresa.

Además de una disminución de los servicios, también es menor la cantidad de líneas aéreas que están operando en el mercado interno. Hace dos años, por la política apertura aérea que impulsó el gobierno anterior, había mayor competencia, entre otros motivos, por la llegada de las empresas low cost.

En junio del 2019 operaban en el país Aerolíneas Argentina, Latam, Flybondi, Norwegian, JetSMART, Andes y Avianca. El mes pasado, el mercado se repartió entre Aerolíneas Argentinas, Flybondi, American Jet, JetSMART y LADE. En estos dos años, la participación de la línea de bandera pasó del 63% de total de los servicios al 70%.

En cuanto a cantidad de gente transportada, en junio de hace dos años, volaron 1.191.000 pasajeros. El mes pasado, sólo 168.000 personas, lo que representa un 14% del volumen de viajeros de hace dos años.

La comparación con 2020 no es representativa ya que gran parte del país permanecía cerrado por la cuarentena.

El dato positivo es que los destinos se mantienen con igual oferta que en 2019. Incluso, algunas aerolíneas están abriendo nuevas rutas. Por ejemplo, JetSMART comenzará a operar en agosto las rutas entre Rosario y Neuquén o Corrientes Posada. Mantiene las actuales Buenos Aires-Mendoza y Mendoza-Bariloche.

Con esta situación de fuerte caída de pasajeros, se llega al comienzo de las vacaciones de invierno, lo que muestra que los argentinos no están demandando servicios aéreos.

Además de los motivos mencionados, la situación sanitaria desalienta la movilidad dentro del país. No sucede lo mismo en los vuelos al exterior, donde la demanda es superior a la oferta de vuelos y el nivel de ocupación de los vuelos es, en general, al máximo de su capacidad.

Para evitar contagios, los turistas preferirán utilizar medios propios y terrestres, como viajar en auto,

Lo que está claro es que el crecimiento de la actividad aerocomercial de cabotaje en los próximos días no será lo suficiente para que, desde un piso tan bajo, pueda cambiar la tendencia de los últimos meses.