Máximo Kirchner va por todo y está a un paso de controlar el PJ
El hijo del matrimonio Kirchner tiene todo listo para asumir la presidencia del Partido Justicialista de Buenos Aires en el mes de febrero. Antes deberá doblegar la resistencia de históricos intendentes del conurbano que temen perder su poder.
Con perfil bajo y poca exposición mediática, Máximo Kirchner avanza en su ambición de hacerse con el control del PJ bonaerense y catapultar a La Cámpora en la provincia. Su estrategia es osada y amenaza a históricos intendentes del conurbano que ven con recelo las intenciones del primogénito de los Kirchner de arrebatarles el poder. De a poco Máximo ha ido consiguiendo apoyos y pretende asumir al frente del partido en febrero, pero hay barones del conurbano que podrían ejercer resistencia.
El Frente de Todos está compuesto por distintas facciones del peronismo que luego de años de enfrentamiento se unieron para llegar al poder. En ese espacio confluyen massistas, albertistas, kirchneristas y hasta duhaldistas, que poco tienen en común. Por eso se anticipa tormenta en la definición de autoridades partidarias ante la embestida de La Cámpora para hacerse del poder.
Este fin de semana Alberto Fernández ratificó su apoyo a Máximo Kirchner y criticó a tres intendentes que, según el presidente, hicieron operaciones mediáticas contra el hijo de la vicepresidenta de la Nación. Según Infobae, en un asado en la casa de Martín Insaurralde el presidente fue claro frente a otros intendentes que compartían la comida.
Los apuntados serían Juan Zabaleta (Hurlingham), Gustavo Menéndez (Merlo) y Fernando Gray (Esteban Echeverría). Los dos últimos son las actuales autoridades del partido. Menéndez culmina este año su segunda etapa como presidente, y le tocaría asumir por última vez a Gray, con Menéndez como vicepresidente.
Pero ese plan está en dudas por la irrupción de Máximo Kirchner en escena. El líder de La Cámpora quiere llegar a la presidencia con consenso y para ello es clave el papel de dos personas: Alberto Fernández y Cristina Kirchner. Incluso de algunos intendentes como el de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde.
Para Alberto Fernández asumir el como presidente del PJ a nivel nacional y Máximo Kirchner como presidente del PJ bonaerense marcará un equilibrio interno dentro del Frente de Todos.
Por eso el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro se encargó de expresarle a Fernando Gray que hay consenso en el Gobierno para que Máximo Kirchner se haga cargo de la conducción. Lo hizo por teléfono, algo que no le pareció correcto al intendente de Esteban Echeverría. Gray tenía que asumir como presidente en diciembre y ese acto se postergó.
"Se puede discutir todo menos la unidad", afirmó un intendente sobre este conflicto. Pero es indudable que a muchos caciques no los convence el modelo kirchnerista y podrían ejercer resistencia hasta dónde puedan. Y al parecer ese límite ya ha llegado y solo resta determinar los términos para que Máximo Kirchner se convierta en el nuevo conductor del PJ bonaerense.
Desde ese lugar, con Axel Kicillof como gobernador, el kirchnerismo podría imponer candidaturas para que La Cámpora, finalmente, se haga con el control del partido.