Papas a la crema con queso y pimienta negra, toda una delicia

Utilizar papas en la cocina es algo realmente muy fácil ya que este vegetal tiene un sinfín de aplicaciones y no presenta limitaciones a la hora de combinarlo con otros ingredientes. Puedes disfrutar de papas solas, acompañadas simplemente por ajo y perejil y un toque de aceite o puedes disfrutarla como parte de una receta más compleja, como te enseñaremos hoy.

Para preparar unas deliciosas papas gratinadas no necesitas muchos ingredientes ya que lo que buscaremos es que las papas absorban y demuestren el fiel sabor a la crema de leche. Eso si, no hay restricciones en cuanto a los condimentos que puedes utilizar para acompañarlos. Además, puedes elegir crear tu propia combinación de quesos para acompañar esta receta.

Ingredientes:

• ½ kilogramo de patatas
•  1 bote de nata o crema de leche grande
•  1 taza de queso rallado
•  1 pizca de pimienta negra molida
•  1 pizca de sal
•  1 pizca de orégano

Procedimiento:

Comienza por pelar las patatas y cortarlas en rodajas de más o menos 5 mm. Entonces mételas en una olla, cúbrelas con agua, espolvorea un poco de sal y llévalas al fuego. Hierve las patatas durante 10-15 minutos y luego escurre bien el agua.

Unta la fuente o bandeja de horno donde quieras elaborar las patatas gratinadas con nata y queso y cubre la base con una capa de los tubérculos. Luego vierte un poco de crema de leche y queso rallado por encima y después espolvorea la sal y la pimienta molida al gusto. Repite este mismo paso hasta acabar con todos los ingredientes por capas.

Cuando termines de montar la bandeja de patatas al horno con nata y queso, espolvorea el orégano, cubre la fuente con papel de aluminio y cocínalas con el horno precalentado previamente a 200 °C durante 10-15 minutos. Luego retira el papel de aluminio y sigue horneando hasta que se doren bien.