El vínculo con tu mascota

Tips para evitar que tu perro ladre mucho

Si bien es una expresión natural del animal, existen algunos trucos para que no se excedan. Cómo lograrlo.

Napsix viernes, 1 de abril de 2022 · 20:08 hs
Tips para evitar que tu perro ladre mucho
Foto: Archivo

Los perros nos alegran cada momento, en especial cuando volvemos a casa, y nos manifiestan esa intensa y conmovedora emoción de volver a vernos. Para los amantes de las mascotas, no hay nada que se compare a ese instante. Podemos estar exhaustos después de una dura jornada laboral, o de una clase de estudio agotadora, o haber discutido duro con nuestra pareja. Pero ellos siempre estarán ahí para recordarnos el amor que nos tienen. Ahora bien, ¿qué pasa cuando sus ladridos ya dejan de ser enternecedores y se vuelven molestos?

Los veterinarios siempre hablan de lograr y consolidar un vínculo emocional con nuestro perro. Sólo así podremos conocerlo bien y comprender sus necesidades. Y siempre nos aclaran y advierten que por nada del mundo ejerzamos violencia sobre él. Si le pegamos solo conseguiremos que nos tenga miedo, o enardecerlo. Es el mismo efecto que ocurre entre los humanos. En el caso de los ladridos, hay momentos en que el perro ladra por una necesidad o malestar concreto, en otros puede que solo se deba a mañas que podemos ir corrigiendo.

Si no vamos a tenerles paciencia, jamás adoptes una mascota

Causas del ladrido en exceso

Lo primero que debemos saber es que cuando un perro tiene muy arraigado el hábito del ladrido suele ser muy difícil de modificar. Por esto es importante detectar el exceso antes de que lo naturalice, para luego trabajar desde la comprensión y el amor los modos de contenerlo, para mejorar la convivencia. Seguramente nuestros vecinos estarán agradecidos.

Dicho esto, podemos asegurar de acuerdo los especialistas que los perros emiten sus ladridos en exceso cuando ven que sus necesidades básicas de bienestar no están satisfechas. Ellos se comunican a través de sus ladridos y podemos detectar distintos tonos, en especial cuando piden comida, o paseo, o simplemente piden llamar la atención para interactuar con su amo.

Trucos para que no ladren

No estresarlo: aunque te parezca gracioso, los perros pueden estresarse si no se ven atendidos, o compensados por sus dueños. Esto es dejarlos solos, no sacarlos a pasear para que liberen energía, discontinuar su alimentación. El perro así ingresa en un estrés que lo hace ladrar a repetición.

Evitar su soledad: el perro es un animal que anda en manada por naturaleza. Si vas a adoptar un cachorro para "abandonarlo" en tu patio o jardín, pensalo bien antes. Estarás promoviendo a un futuro ladrador. Los perros necesitan del vínculo, y de la socialización.

Educarlos socialmente: desde cachorros debés atenderlo y prepararlo para vivir con la familia, y en un entorno social.  Así les enseñaremos a manejar sus miedos y a que no se sobresalten con cualquier estímulo.

Darle un espacio para que se realice: si el perro no tiene lugar en el hogar para desenvolverse solo, explorar, jugar, recrearse, se va a sentir muy frustrado y ladrará con seguridad.

El perro es un animal social, necesita de nuestra atención

Adiestramiento inconsciente: sin querer muchos cuidadores premian los ladridos de sus perros en situaciones concretas que les gustan o les hacen gracia, el problema aparece cuando el perro lo utiliza constantemente. Esto debe evitarse.

Territorialidad: los perros ladran naturalmente cuando alguien se acerca a la casa donde mora, pero si ladra de forma excesiva y reiterada cada vez que oye el timbre o a alguien aproximándose puede tratarse de un problema de territorialidad.  Es un aspecto a trabajar, para que esa actitud vigilante no se vuelva una molestia. 

Problemas de salud, sordera y vejez: algunos perros con la edad pierden capacidades auditivas o de visión, por ese motivo pueden ladrar. Aquí deberás llevarlo al médico.

Siempre es importante trabajar en la socialización temprana del can, desde cachorros, para neutralizar miedos, educarlo en el contexto social, y así sin perder sus condiciones instintivas, la domesticación logrará una integración más saludable.

Archivado en