Increíble: la historia detrás del anillo que Lady Di no alcanzó a usar

La princesa Diana de Gales falleció el 31 de agosto de 1997 en un terrible accidente automovilístico en París. El Mercedes Benz en el que viajaba junto a su novio, el empresario egipcio Dodi Al Fayed, impactó contra la columna número 13 del Puente del Alma. La pareja, junto a Trevor Ress-Jones, el guardaespaldas de Lady Di, huían de los insistentes paparazzi.

Si esa noche no hubiera perdido la vida en el choque, su destino hubiera cambiado radicalmente. Según reveló el joyero Alberto Repossi al periódico italiano Corriere della Sera, el empresario le había encargado para la princesa, un anillo que ella iba comenzar a usar el 1 de septiembre de 1997, es decir, un día después de su muerte.

La pareja lo había citado días antes en un hotel de Saint-Tropez, en Francia, para que tomara las medidas del dedo de Diana y modificara un anillo que ella había visto y le había fascinado en una joyería de Repossi en Mónaco. El pedido era concreto: que estuviera listo para el 30 de agosto ya que el 1 de septiembre lo iban a necesitar para un “anuncio importante”.

Al Fayed recogió la joya en Paris tal como habían pactado pero Diana nunca llegó a usarla. Todo indica que iban a anunciar su compromiso si no hubiera sido por su temprana e inesperada partida que conmocionó al mundo entero.