Los misterios de la boda de Salma Hayek, revelados 13 años después
Salma Hayek se casó en Venecia durante el 2009 pero el traje de novia que llevaba aún encierra muchos misterios: todo lo que se sabe de la historia del vestido de la diva mexicana, firmado por Balenciaga, en esta nota.
Salma Hayek juró que nunca se iban a conocer los pormenores de su historia de amor con quién es su marido desde hace 12 años: el empresario francés y multimillonario François-Henri Pinault. Esto incluía detalles de su boda. Sin embargo, el romance de una mujer con su vestido de novia trasciende tarde o temprano y, gracias a algunas fotografías filtradas por internet, podemos conocer un poco más de su espectacular diseño de princesa.
Un vestido de ensueño: el diseño que lució Salma Hayek en el casamiento más caro de Europa fuera de la realeza
La productora ejecutiva y actriz mexicana Salma Hayek tuvo su historia de amor, no sin tormentos ni inestabilidades, con uno de los millonarios europeos más codiciados del mundo.
El romance terminó en boda y en una hija, Valentina Paloma, que actualmente tiene 13 años. Y aunque el empresario François-Henri Pinault ya tenía un matrimonio anterior con una empresaria y una relación con la modelo canadiense Linda Evangelista, con quién tuvo también un hijo, para Salma era su primer matrimonio, con toda la ilusión que eso implica.
La estrella de Eternals eligió hasta el más mínimo detalle del evento que se llevó a cabo en Italia, en el teatro para ópera conocido como La Fenice de Venecia. El espacio, además de lujoso, fue elegido por Salma Hayek por ser el más romántico que encontró. Y por querer vivirlo como el día más especial de sus vidas, como toda novia.
Pero claro, su feliz matrimonio era con el empresario François-Henri Pinault, multimillonario dueño de un grupo de marcas de lujo entre las que se encuentran Gucci, Bottega Veneta, Yves Saint Laurent, Balenciaga, entre otras. Y es por eso que su fortuna estuvo a su disposición para hacer todos los encargos, arreglos, lujos y caprichos que hicieran falta para hacer feliz a su mujer.
Luego de años de una relación que empezó como un “touch and go“ por la distancia de residencia (ella vivía en Los Ángeles, Estados Unidos, y él en Francia), las cosas se pusieron serias.
François-Henri Pinault y la actriz mexicana se enamoraron perdidamente, aunque en un momento hubo una breve separación. Pero luego retomaron con más fuerza que nunca, decidieron formalizar y apostar todo. Así, Salma Hayek en menos de dos años tuvo una hija, recuperó su figura y se casó. En ese orden, todo entre 2007 y 2009.
Pero volvamos al vestido: debía ser un cuento de hadas. La fiesta iba a tener más tintes mexicanos que europeos y Salma Hayek había programado ser protagonista de ese momento inolvidable. ¡Hasta iba a cantar con Bono de U2!
La ceremonia debía ser lujosa y sin duda lo fue. Se habló de uno de los eventos europeos más caros, masivos e importantes de ese momento, además de una de las fiestas más divertidas que hubo jamás en el ambiente.
Salma Hayek tenía entonces 43 años y hacía poco había sido madre. La ilusión estaba a flor de piel y su look nupcial debía dejarlo claro.
Así fue como decidió usar sus influencias y encargar el vestido de novia más espectacular de la historia creado por el diseñador Nicolas Ghesquière de Balenciaga. Más tarde se transformó en la cabeza creativa de Louis Vuitton, pero en ese momento aún era director creativo de la exclusiva marca española.
Aunque la novia guardó celosamente las fotos de ese momento, con el tiempo trascendieron algunos vía internet, ya que los invitados no fueron pocos: 150 amigos, parientes y afectos entre los que se encontraba Penélope Cruz, la mejor amiga de Salma Hayek, Gael García Bernal, Diego Luna, Charlize Theron, Bono, Anna Wintour, entre otras reconocidas figuras.
Detalles del vestido de novia de Salma Hayek y cómo lo encargó
Dicen que en ese momento, la diva mexicana dudó entre un traje más tradicional y uno más suntuoso, aunque terminó tentada por tener a su disposición las primeras marca de lujo de Europa.
Y finalmente, luego de varias entrevistas con distintas propuestas, se decidió por un diseñador con el que avanzó: Nicolás Ghesquière, el mismo que le confeccionara el vestido de novia a Nicole Kidman para su matrimonio con Tom Cruise ¡Otra boda en Europa! ¿Recuerdan?
El vestido de novia de la veracruzana fue finalmente un clásico pero a todo lujo: el diseño fue escote en V profundo, sin mangas, completamente bordado y con lujosas aplicaciones de pedrería en toda la parte superior, para después ceñir su cintura en un corte algo bajo, y luego, abrirse en un vaporoso tul de muchas capas con “efecto globo“ que la hacía lucir como una princesa super estilizada y mágica.
El pelo recogido con velo acompañaba el radiante look y junto con el ramo de orquídeas y cristales brillantes de Salma Hayek hacían de la imagen nupcial una ensoñación deslumbrante.
La boda de Hayek con su marido costó alrededor de un millón y medio de dólares. Más de 40 guardias protegieron la intimidad de la fiesta que duró hasta las 4 de la madrugada, y en donde la novia, como estaba pactado, cantó con el vocalista irlandés Bono, quien luego le dedicó la canción “One“.
No se sabe si hubo un segundo cambio, aunque aseguran que Salma Hayek es buena bailarina y seguramente tenía un “plan b“ para disfrutar de la fiesta más cómodamente. Confiamos en que pronto transciendan esas fotos también ya que Salma siempre es pura inspiración y comienza la temporada de bodas.