Milán, París, Londres, Nueva York y Tokio son las sedes de las semanas de la moda o  Fashion Week que traen el estilo de lo que luego se usará en todo el planeta.

El evento que se realiza cada año en la capital de Japón reunió esta vez a 51 diseñadores nacionales e internacionales.

Se celebró entre el 5 y el 20 de marzo, patrocinado por la tienda más grande de todo el país, Rakuten. Es por este motivo que la semana de la moda nipona se conoce como Rakuten Fashion Week Tokyo. 
 

El gigante de la moda

Japón es uno de los principales mercados de la moda del mundo, donde la ventaja de desarrollo por los costos de confección es inmensa.

En cuanto al encuentro, en todo el mundo y al son de la pandemia, estos eventos de moda fueron distintos en casi todos los países. Pese a todo, no suspendieron la presentación de nuevas líneas y diseños pero sí redujeron el tamaño del evento presencial y apostaron a la tecnología para desarrollar la parte virtual del encuentro.

El objetivo: evitar contagios, respetar restricciones pero también hacer de este evento, una acción más sustentable. Aunque es difícil medir exactamente el impacto que tienen, desde que se habla sobre la huella de carbono y los residuos que genera la industria, la presentación de las nuevas colecciones también se encuentra en la mira. Cada despliegue, contamina. 

Por este motivo, en un año en donde el virus marcó el ritmo, también los desfiles de moda replantearon la influencia de la tecnología y el modo en el que ésta serviría para desacelerar la manera en que se presentan las temporadas, evitar que sea tan masivo y revisar procesos productivos, entre otras cuestiones.

De los 51 diseñadores convocados, sólo 20 presentaron sus colecciones de manera presencial. En cuanto al público, se permitieron sólo 20 personas, tan sólo el 25% de los que habitualmente concurren por capacidad de sala.

Dentro de las pasadas más esperadas estuvieron las marcas japonesas Undercover y Beautiful People. También se presentó la última colección de Mistergentelman del cantante de Hip Hop y diseñador japonés Takeshi Osumi, conocido como Big O.

El creativo había presentado los bocetos de sus diseños desde el hospital, donde unos días después murió de una sepsis el 24 de enero de 2021.

Estilo nipón

La moda japonesa tiene una clave: la combinación. Con cierta tendencia a la experimentación, la yuxtaposición de prendas, colores y texturas es una una cualidad que caracteriza a los diseñadores de la nación del sol naciente.

Esta vez, la innovación es la experimentación con nuevas siluetas y la reinterpretación de las pautas de estilo.

Como siempre, el juego de contrastes está presente en la moda japonesa. Pero además de esto se vio el monocromo como una tendencia fuerte y las prendas con volumen. Aunque, sin dudas, el eje de la temporada será el oversize, como lo es en otras capitales de la moda.

Colores neutros, tierra y marrones anaranjados. Por supuesto, también negro y blanco, pero conviviendo de forma novedosa.

La comodidad y la superposición serán dos claves que también tienen reminiscencias al aislamiento social obligatorio y lo que dejó como tendencia.
 

La sastrería se encuentra con la deconstrucción, algunos toques de estilo cowboy con un poco de Saint Laurent y otro poco del estilo hypebeast, el modo de vestirse de quienes coleccionan artículos de moda urbana de marcas cotizadas, y hacen de sus outtifs una colección de prendas icónicas.

Se ha priorizado la ropa cómoda y versátil, útil para el zoom o el supermercado. Las líneas asimétricas son tendencia, al igual que los cuellos polera y las mangas anchas.

Tendencias ineludibles que se imponen para la próxima temporada y no pueden faltar en el radar, al menos, para tomar algunos lineamientos básicos como inspiración.