Renueva tu existencia: secretos de la Terapia Ocupacional para rediseñar tu estilo de vida

En el corazón de la salud y el bienestar personal, la Terapia Ocupacional emerge como una disciplina clave, orientada a enriquecer la calidad de vida mediante actividades cotidianas. Esta práctica se centra en la persona, utilizando las tareas diarias como vehículos para fomentar la independencia, la inclusión y el logro de metas personales.
La esencia de esta terapia radica en su capacidad para habilitar una participación activa y satisfactoria en las ocupaciones que tienen significado para cada individuo. La licenciada en Terapia Ocupacional, Mayra Farias, Mat. Prov. 172, habló con MDZ sobre consejos a tener en cuenta en un rediseño de estilo de vida.

Basándose en los deseos y necesidades de las personas, los terapeutas ocupacionales aplican su profesión para guiar hacia la realización personal. “Es crucial considerar cómo distribuimos nuestro tiempo entre el autocuidado, las obligaciones y los momentos de ocio. Lograr un balance en estas áreas no solo mejora nuestro estado general, sino que también salvaguarda nuestra salud mental y física”, comenzó diciendo la licenciada en Terapia Ocupacional, Mayra Farias.
Además, la profesional en el tema agregó: “Para emprender este viaje hacia un estilo de vida reequilibrado, es fundamental estar equipado con la motivación y la planificación adecuadas. Antes de iniciar, es esencial evaluar las herramientas a disposición y prever posibles obstáculos. Reflexionar sobre la disponibilidad de tiempo, los impulsores motivacionales y los recursos materiales necesarios constituye el primer paso hacia un proyecto de vida renovado y estructurado”.
Este enfoque holístico no solo apunta a metas y objetivos claros, sino que también subraya la importancia de las herramientas y estrategias para alcanzarlos, marcando un camino ordenado hacia la mejora continua del bienestar personal. Finalmente, Mayra Farias mencionó:
“Para identificar estas herramientas podemos preguntarnos acerca de los factores temporales y espaciales que requiere el proceso (disponibilidad horaria y demanda horaria del proyecto o proceso a realizar); identificar los factores motivacionales que impulsan el proceso (¿Es una motivación propia? ¿Es influenciada por el contexto? ¿Los resultados serán de mi interés?); reconocer los recursos materiales que requiero para llevarlo a cabo (materiales, gastos); una vez analizados estos factores, podremos iniciar el proyecto de forma ordenada y estable”, dijo la Licenciada en Terapia Ocupacional.