Tienes el cuello flácido: sigue estos ejercicios para tonificar

Tonificar el cuello es posible y, con la práctica de algunos ejercicios, esa zona gana firmeza y definición. La flacidez en el cuello suele asociarse al envejecimiento, ya que con el paso del tiempo disminuye la producción de colágeno y elastina, las proteínas responsables de mantener la piel firme. 

Sin embargo, la exposición al sol, las posturas incorrectas, la pérdida de peso abrupta y la genética también influyen en la aparición de este problema. Pero, hay ejercicios que activan los músculos del cuello y permiten mejorar su apariencia.

Otro factor que contribuye a la flacidez del cuello es la pérdida de peso rápida. Cuando se adelgaza de forma drástica, el cuerpo no siempre se adapta a los cambios de manera uniforme, y esto puede dejar la piel menos elástica en zonas como el cuello. Para minimizar esta flacidez, es esencial cuidar la alimentación y, en lo posible, perder peso de manera progresiva. Mantener una dieta equilibrada y rica en nutrientes favorece la producción de colágeno y ayuda a que la piel se recupere más rápidamente de estos cambios.

La postura también desempeña un papel importante en la tonificación del cuello. Mantener la cabeza inclinada hacia abajo durante mucho tiempo, como cuando se mira el teléfono, debilita los músculos del cuello y fomenta la aparición de pliegues. Adoptar una postura erguida y elevar el teléfono o la pantalla de la computadora a la altura de los ojos evita la inclinación excesiva del cuello. Además, corregir estos hábitos resulta esencial para fortalecer los músculos de esta área y mejorar su apariencia.

Para trabajar directamente los músculos del cuello, se recomiendan varios ejercicios que fortalecen y tonifican esta zona. Los ejercicios isométricos son una excelente opción, ya que involucran mantener una postura con resistencia, lo cual activa los músculos en profundidad. Un ejercicio simple consiste en presionar la cabeza contra la palma de la mano, tratando de inclinar la cabeza hacia adelante mientras se resiste con la mano. Esta actividad, mantenida durante diez segundos y repetida varias veces, ayuda a fortalecer los músculos de la parte frontal del cuello.

Los ejercicios dinámicos también son de gran ayuda para tonificar esta área. Uno de los más efectivos es inclinar la cabeza hacia un lado, luego al otro, estirando los músculos laterales del cuello. Repetir este movimiento varias veces en cada dirección ayuda a prevenir la flacidez y mejora la elasticidad. Realizar estos movimientos de manera controlada y sin esfuerzo excesivo resulta ideal para mantener la zona activa y evitar el debilitamiento de los tejidos.