La relación amorosa entre Lourdes Ornelas y Camilo Sesto fue apasionada y tormentosa por igual. Hubo muchos encuentros y desencuentros, amor y peleas, pasión y odio. De toda esta mezcla de sentimientos, es que nació el primer y único hijo de los dos: Camilín.

Lourdes Ornelas tenía 25 años cuando quedó embarazada de Camilo Blanes. Era joven, moderna y, sobre todas las cosas, sabía lo que quería. Aunque estaba muy feliz por la llegada de su hijo, en las fotos que hay de ese momento siempre se la ve seria, no disfrutando plenamente, eso quizás era por la relación que tenía con el padre de su hijo.

Lo que sucedía es que, cuando Camilo Sesto se enteró que sería papá, no estaba muy convencido, fue en ese momento que la mamá de Camilín se puso firme y dijo que ella tendría a su bebé. A los cuatro meses de embarazo fue que Lourdes Ornelas decidió abandonar España y se fue a México para estar acompañada por su familia.

Desde ese momento, hasta que el bebé cumplió cuatro meses, el intérprete de “Vivir así es morir de amor” desapareció por completo del mapa. Después, volvió como si nunca nada hubiera pasado para reconocer a su hijo legalmente. Fue en ese momento que decidieron volver a intentarlo una vez más y los tres se mudaron a España para formar una familia.

Ese proyecto que tenían los dos de construir sus vidas juntos duró unos seis años más o menos. Pero no fue el cuento de hadas que Lourdes Ornelas pensó que sería, fue por eso que, cansada de los maltratos, decidió huir con su pequeño hijo a México.

Así se veía Lourdes Ornelas a los 25 años

Lourdes Ornelas era una joven que estaba muy metida en la moda, pues, si bien no era artista, trabajaba como asistente de Lucía Mendez. Tenía el pelo largo, como hasta la mitad de la espalda. Ni lacio ni con chino, algo ondulado. El cual acompañaba con un fleco partido a la mitad, dejando despejada su frente.

Su maquillaje siempre era cargado. Le gustaban los ojos marcados y, por lo general, delineados, chapas rojas y los labios rosados. Sus looks los solía completar con grandes aretes que sobresalían de su pelo suelto, brindándole un estilo único.

En cuanto a la ropa que usaba, en todo momento estaba a la moda y súper bien combinada. Lucía conjuntos que resaltaba su esbelta figura, pero sin ser demasiado reveladores.

Era una mujer muy atractiva que sabía cómo lucir bien, luciendo moderna y elegante al mismo tiempo. ¿Te gusta su estilo?