Alejandro Vigil: 'Hoy la gente viene a beber vino y después está la nieve”

Recién llegado de una gira de negocios por Europa, el empresario y enólogo Alejandro Vigil pasó por el estudio de MDZ Radio para brindar un panorama del estado del turismo gastronómico hoy en la provincia. “Hemos crecido en los últimos 10 años y hemos tenido que trabajar fuerte el tema de servicios y productos”, para Vigil la apertura de restaurantes de bodegas generó un fuerte y rápido crecimiento del sector.

Para el enólogo fue importante en esta evidente evolución de la ruta gastronómica mendocina “el crecimiento de los cocineros mendocinos, la inversión en infraestructura y capacitaciones constantes”. Según explicó Vigil, desde sus emprendimientos el enólogo “crea marcas en lugar de acumular dinero” y eso genera puestos de trabajo para muchas personas.

Alejandro Vigil muestra una constante preocupación por la creación de más y mejor opciones de turismo gastronómico, uno de sus proyectos a futuro es “abrir un terciario en la zona de Chachingo especializado en turismo gastronómico”. Pero el empresario también es crítico con las mejoras que necesita el sector: “nos falta un vuelo interno de Mendoza a Europa. Nuestras provincias competidoras, Córdoba y Buenos Aires, lo tienen”. Para Vigil también es necesaria la inversión privada.

Más allá de los aciertos y errores en el sector, Vigil es optimista y cree que el turismo gastronómico sostiene su crecimiento en época de crisis. “Sin lugar a dudas en Mendoza ha habido una transformación fuertísima de las rutas gastronómicas turísticas. Hoy la gente viene a beber vino y luego a la nieve”.

Respecto a su visita en Europa, el enólogo comentó que está trabajando fuertemente en exportar productos a esa zona porque “hay una idea y políticas públicas para ayudar a la población en ir pasando de la ingesta de bebidas blancas al vino”, ya que no hace el mismo daño a la salud. Vigil recordó que no hace mucho tiempo se intentó llevar a cabo una campaña en desprestigio del vino aquí en Mendoza como bebida insalubre y esta iniciativa de gobiernos europeos demuestra lo contrario.